El proyecto incluye un inventario de propuestas artísticas activas que desarrollan un total de 33 entidades y asociaciones gallegas para trabajar la inclusión de personas con diversidad funcional y otras capacidades.
El retorno se realiza con unas bases distintas que se adaptan a la actual situación, con la modalidad juvenil y una única fase.
Consideran que es una prestación necesaria para atender a personas que superaron la enfermedad como a familiares, así como otros casos paralelos, como puede ser la soledad, el miedo y los cuidados provocados por la situación sanitaria.