La estación intermodal de A Coruña continúa con su puesta a punto antes de estrenarse, previsiblemente, en algo menos de un año. Durante la jornada de ayer, se realizaron los trabajos de demolición del edificio de piedra adyacente a las instalaciones de la estación de ferrocarril de San Cristóbal, con el objetivo de adecuar el espacio para la ampliación de la infraestructura principal, así como la implementación de una zona comercial desde la entrada de la terminal antigua a, más o menos, donde se encuentra el edificio que opera actualmente como estación provisional.
De esta forma, es la segunda infraestructura de piedra que se derriba este verano por estas obras. La última protagonista, a finales del pasado mes de julio, cuando demolieron la marquesina adosada al edificio histórico que albergaba la parada de taxis. Esta obra –que no formaba parte de la estructura original– se llevó a cabo, según Adif, con el objetivo de reforzar la visibilidad del inmueble histórico y su integración en la plaza de acceso a la estación y el parque de San Cristóbal. El edificio histórico original data de 1935 y constituye el único ejemplo del estilo neorrománico del ferrocarril en España.