Agosto es mes de eventos sociales de todo tipo, aglomeraciones y llegada de turistas, la combinación perfecta de la que se aprovecha el coronavirus para atacar. Los casos en A Coruña ya han alcanzado el pico del verano hace cuatro días, cuando se registraron 47 ingresados en el Chuac. A día de este martes, el número ya había bajado a 37, ninguno en UCI y la misma cifra que había el año anterior en estas fechas, una tendencia que confirma un patrón que llegó para quedarse.
“En invierno, el frío y la baja humedad hace que la gripe se sienta más cómoda y ahí casi no se aprecia el covid. Ya cuando empieza el verano empiezan a verse casos. Es un virus menos sensible a las altas temperaturas y se conserva mejor en esta época. Coloniza todo lo que puede porque no hay competencia con la gripe”, explica Pedro Marcos, médico adjunto del servicio de Neumología del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac).
El pico de este año es “menor” que el de 2024 y se alcanza meses más tarde. “El pico del año pasado coincidió con San Juan, cuando había 94 ingresados. El de 2025 no está siendo tan importante”, asegura el especialista.
Tampoco es grave, la mayoría de los casos corresponden a pacientes trasplantados o con otras patologías. Es decir, no ingresan por covid, sino “por otros problemas” y se les detecta al hacerles el test. Prueba de ello es que en la planta de Neumología solo había este martes cinco personas con covid de los 37 hospitalizados con esta enfermedad en el Chuac.
“Esto es algo que con los años ha cambiado y afortunadamente no vemos esas neumonías terribles que hubo en su momento. Ahora son excepcionales. Y suele ser gente que, a pesar de todo, nunca llegó a vacunarse”, indica Pedro Marcos.
El covid se mueve mejor en esta época del año porque es un “virus muy social”. “Donde haya más movimiento, y las zonas turísticas desde luego lo tienen, se favorece la transmisión. Además, ya sabemos que es mucho más contagioso que la gripe y es una época donde hay mucho evento social”, recuerda el neumólogo.
Aunque hay covid, también circula la gripe y los catarros de verano. “Lo que pasa es que antes los pacientes llegaban al hospital y no éramos capaces de diagnosticarlos porque no había test tan avanzados”, indica.
Aunque no se nota especial incidencia en el hospital, sus síntomas –como fiebre o malestar– son parecidos y pueden confundirse incluso con una alergia. “Si uno se pone a afinar, vemos que las molestias al tragar los asociamos más al covid”, destaca Pedro Marcos.
Frente a este nuevo repunte de la infección, el especialista del Chuac pide “sentido común”: “Si tienes síntomas, no ponerse en contacto con otra gente y, si tienes otras patologías importantes, protegerse con la mascarilla. Más que para evitar contagios, es para una superprotección para los más vulnerables”.