Un vecino de A Coruña de 21 años fue detenido el pasado sábado por un delito de violencia de género. Los hechos ocurrieron en el entorno del Campo de Marte, cuando la víctima, que había denunciado a su expareja por malos tratos, presionó el pulsador de de emergencia. Cuando los agentes se personaron en el domicilio pudieron comprobar cómo el agresor estaba encima de la víctima, propinándole una paliza. Al tratarse de un bajo era perfectamente identificable a pie de calle.
Los agentes desplazados hasta el lugar advirtieron de su presencia, se identifcaron desde fuera y ordenaron al agresor que se apartase de la mujer. Lejos de obedecer las órdenes intensificó su ataque, hasta que la mujer, mientras los policías intentaban tirar acceder al domicilio, consiguió zafarse y abrir la puerta. El joven, que profirió insultos y amenazas a la Policía, fue reducido, no sin resistencia, y puesto a disposición judicial. El lunes prestó declaración, mientras la mujer se recuperaba de las numerosas contusiones sufridas.
Curiosamente, el aviso activado por la víctima era por otra pareja anterior, mientras que el acusado también tenía varios antecedentes por malos tratos a otras novias previas. Los agentes de la Policía Nacional que actuaron no solamente demandan más efectivos, sino también que se reconozca su profesión como de riesgo.
Apenas han transcurrido 15 días desde el asesinato de Maritza, la mujer a la que su expareja asestó varias decenas de puñaladas hasta terminar con su vida. Ella también había presentado denuncias por malos tratos.