La campaña de multas contra los dueños de perros que no recogen las heces está llegando a su fin después de un mes en el que los agentes de la Patrulla Verde de la Policía Local han extremado su vigilancia en los parques, plazas y calles de la ciudad. Está por ver cuántas sanciones se han impuesto porque el número al cabo del año suele ser extraordinariamente bajo. En realidad, la Policía Local sanciona diez veces más a personas por orinar en la calle que a dueños de animales que dejan en la acera los excrementos de sus mascotas.

Así lo reflejan las estadísticas municipales: en 2024, se multó en 63 ocasiones a alguien que estaba haciendo sus necesidades en la vía pública. La mayor parte de las veces, en un ambiente de ocio nocturno, donde el consumo constante de bebidas alcohólicas obliga a vaciar urgentemente la vejiga. Es cierto, por otro lado, que calles como las perpendiculares a la de San Andrés, como Travesía Vista, o su paralela, Travesía Mariñas, se llenan de gente que orina en la pared, en cualquier rincón, llegando a formarse verdaderos riachuelos.

Además, las autoridades reciben a menudo las quejas de los vecinos que tienen que soportar que los juerguistas orinen en sus portales y garajes. El olor y el aspecto que dejan al día siguiente es insalubre. Sin embargo, este problema no suscita tantas quejas como el de los excrementos caninos, que la propia alcaldesa, Inés Rey, reconoció que es uno de los temas más recurrentes que sacan a relucir los vecinos que le abordan.

Sin embargo, las sanciones emitidas por la Patrulla Verde en el epígrafe ‘molestias animales’ el año pasado apenas suman seis. Es verdad que, en enero ya se aumentó la presión contra los dueños de los perros negligentes, y solo se multó 17 veces.

Hay que recordar que el primer día de la actual campaña no se llegó a sancionar a nadie, así que es muy posible que cuando acabe este año, el número de incontinentes sorprendidos in fraganti siga siendo mucho mayor que el de dueños de canes. Eso, a pesar de que la limpieza de heces supone 360.000 euros al año para las arcas municipales.