Parecen haberse convertido la plaza de San Pablo y su entorno en una zona especialmente atractiva para los amigos de lo ajeno, quienes una vez más tiraron de pillería para intentar arruinar la jornada laboral de uno de los negocios del entorno. Fue la cafetería Auria, en la zona que une Sinfónica de Galicia con plaza de San Pablo, la que pagó el pato esta vez. 

Los hechos ocurrieron pasadas las 21.30 horas. La camarera, quien recientemente había sido objeto de amenazas de muerte por parte de su expareja, se dispuso a atender a un cliente que reclamó su atención en la puerta. Mientras, una pareja que había accedido por la otra puerta al interior del recinto, se dirigió a la barra, abrió la caja registradora y la vació. El botín pudo haber sido mucho mayor si hubieran 'buceado' entre la recaudación, aunque finalmente acertaron a llevarse algo más de 100 euros. No obstante, el sentir de la propiedad es de desprotección. "El perfil siempre es el mismo y estamos cansados y asustados", denuncia. 

En la misma plaza, en espacio de un año, ha habido  robos con motos en el interior de varios locales, amenazas de muerte, intimidación a los clientes y atracos, entre otras incidencias de las que prefieren no dar cuenta los afectados. "Pedimos más seguridad", reivindican en el entorno.