Fotos, muchas, pero ventas, no tantas. Así explican algunos placeros de los mercados municipales lo que se traduce en un verano “sin locura” en lo que respecta a las ventas. “Hay postureo del bueno, mucha foto pero nada más. Viene gente de fuera, mucho crucerista, pero no compran mucho. Sí que hay, también, gente que viene a pasar tiempo con sus familiares y compran, pero no es ninguna locura. A ver si cambia la cosa”, señala Óscar, de Pescadería Nortemar, en la plaza de Lugo.
En la misma plaza de abastos, Teri, de Pescados Teri Ceán, cree que el verano está siendo “animado”, como todos los años, pero coincide con el primer placero en que muchas ventas proceden de personas que llegan a la ciudad a pasar sus vacaciones con familiares. “En julio y agosto se anima la cosa, pero hay muchos coruñeses que se marchan de vacaciones. Lo que más se nota son los turistas que vienen quince días a una casita y compran cosas”, comenta.
Esta vendedora de la plaza de Lugo también menciona a los pasajeros que llegan a bordo de trasatlánticos, quienes “sacan mucha foto”. A Coruña, por lo tanto, tiene una nueva postal en redes sociales: su marisco y pescado en los puestos. Víctor, de Pescados Víctor, afirma que “hay bastante turista, pero los de los cruceros ya se sabe que vienen a mirar. La venta va bien, vamos tirando”.
En el mercado de San Agustín, la otra plaza más visitada, ya se nota la apertura de los locales exteriores. “De venta vamos bien, la verdad. Hay movimiento. La apertura de los locales de fuera nos ha favorecido, ya que se ve más ambiente”, considera Ángela Barrán, presidenta de los placeros.
Pese a que la mayoría de cruceristas solo observa el producto fresco en los puestos, otros lo degustan al momento. Esto es posible en la cantina del piso superior de la plaza de Lugo, y es que los turistas compran en la planta baja el producto y lo llevan a este espacio para que se lo preparen al instante. Del puesto al plato directamente, lo más demandado es el marisco, siendo este el 80 por ciento de los productos que se piden para probar en la propia plaza.
Sin embargo, muchos turistas también piden pescado a la plancha, raxo y tortilla, Hay guías turísticos que ofertan esta opción dentro de sus recorridos. Pero el exterior del mercado no se queda atrás: la afluencia de visitantes es constante. La plaza de Lugo es la zona más tensionada a nivel comercial y ha sustituido a la calle Real como el principal centro comercial al aire libre de la urbe.