El apagón dejó mucho más sustos que contratiempos e incluso más risas que llantos y lamentos, al menos en A Coruña. Seguramente tiene mucho que ver con el carácter local y la forma de enfrentar los problemas, lo que en sí ya provocó una respuesta modélica por parte de los ciudadanos. Sin embargo, del mismo modo que las ya históricas imágenes de La Marina, el Obelisco o la calle Real entre tinieblas, algunos momentos en los locales de hostelería sirven como la mejor fotografía posible. Es caso del Quai, unas de las paradas preferidas en La Marina para la primera copa, y que hasta entrada la noche del lunes trabajó de forma peculiar.
La fuerza del establecimiento son la terraza, la calefacción y su música. Las primera no tuvo problema a lo largo del día, la segunda no fue necesaria y la tercera se solucionó con un altavoz a pilas, de esos con los que los 'domingueros' provocan pavor en las playas. De andar por casa y a pilas. Además, para el trabajo de caja el staff utilizó cascos de runner, de esos que también podrían servir de atrezzo para la película 'Minecraft'. Todo ha quedado como una curiosa anécdota y unos momentos que compartir en redes sociales. Sin más trascendencia.