Un equipo de investigadores ha desarrollado un sistema de inteligencia artificial de vanguardia, denominado FaceAge, capaz de estimar la edad biológica de una persona a partir de fotografías faciales. Este avance, publicado en la revista The Lancet Digital Health, promete revolucionar la evaluación de la salud y el pronóstico de pacientes, particularmente en el campo de la oncología.
El sistema FaceAge ha sido entrenado utilizando una extensa base de datos compuesta por más de 58.000 imágenes de individuos, predominantemente sanos y mayores de 60 años.
El algoritmo demostró una notable precisión en la predicción de la edad biológica, un indicador del estado fisiológico real que puede diferir significativamente de la edad cronológica. La edad biológica, influenciada por factores genéticos y de estilo de vida, ofrece una perspectiva más precisa sobre el envejecimiento y la salud que la simple cuenta de los años desde el nacimiento.
El estudio reveló una correlación significativa entre la edad biológica estimada por FaceAge y el pronóstico en pacientes con cáncer. Los pacientes con cáncer tendían a mostrar una edad biológica mayor que su edad cronológica, un fenómeno asociado con peores resultados de supervivencia.
La incorporación de FaceAge en los modelos de predicción clínica mejoró la precisión de las estimaciones de supervivencia en comparación con los métodos tradicionales, incluyendo la evaluación subjetiva realizada por los médicos.
El desarrollo de FaceAge implicó un proceso de aprendizaje profundo en dos etapas: detección facial y extracción de características. El sistema fue validado en múltiples cohortes de pacientes con cáncer, incluyendo datos del MAASTRO en los Países Bajos y de los centros médicos Harvard en los Estados Unidos.
Los resultados demostraron que FaceAge no solo predice la edad biológica, sino que también proporciona información pronóstica independiente en diversos tipos y estadios de cáncer. Específicamente, una mayor edad estimada por FaceAge se correlacionó con una menor supervivencia general, incluso después de ajustar por factores clínicos como la edad cronológica, el sexo y el estadio del tumor.
En un subestudio con pacientes de cáncer metastásico en cuidados paliativos, FaceAge mejoró las predicciones de supervivencia realizadas por los médicos, lo que sugiere su utilidad para la toma de decisiones al final de la vida. Además, el análisis genómico reveló una asociación significativa entre FaceAge y los mecanismos moleculares de la senescencia, lo que respalda su potencial como biomarcador del envejecimiento.
Los investigadores concluyen que FaceAge representa una herramienta prometedora para la medicina de precisión en oncología, aunque reconocen que se necesitan más estudios para validar estos hallazgos en cohortes más amplias y diversas, y para explorar la aplicación de FaceAge en otras enfermedades relacionadas con el envejecimiento.
La capacidad de esta tecnología para estimar la edad biológica a partir de fotografías faciales, un método no invasivo y de bajo costo, podría facilitar la identificación de pacientes con mayor riesgo y la personalización de los tratamientos.