El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha enviado una carta a la militancia del partido socialista tras la crisis abierta por la dimisión del que fuera secretario de Organización Santos Cerdán en la que asegura que seguirá adelante, denuncia una operación de "demolición moral" a la que se enfrentan los socialistas y propone un debate contra la corrupción.
En una carta con el logotipo del PSOE, Sánchez dice compartir los sentimientos de "dolor, indignación y una mezcla de desconcierto y tristeza" que a su juicio ha provocado en las filas del PSOE el informe de la UCO que señala a Cerdán como receptor de mordidas.
"La sospecha de que compañeros que ocuparon altas responsabilidades hayan traicionado la confianza de este partido y de los ciudadanos es una herida que nos duele a todos", ha indicado Sánchez, que defiende que han actuado con "contundencia", pidiendo "la renuncia inmediata de quien estaba implicado".
Además ha insistido en que no conoció el informe de la UCO hasta la mañana del 12 de junio y considera que eso "habla de la salud democrática" del país porque el Ejecutivo no interfiere en investigaciones judiciales "como sí ocurrió en buena parte de la década pasada", ha lanzado en referencia al Gobierno del PP.