La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, presentó este miércoles la nueva Comisión de Evaluación de la Reforma Laboral que está previsto que finalice sus trabajos antes de que termine este año.
Durante el acto, la ministra formalizó este grupo de personas expertas que tendrá como mandato cumplir el compromiso fijado en la propia reforma laboral de evaluar cada dos años los resultados obtenidos mediante el análisis de los datos de contratación temporal e indefinida, según se explicó.
En octubre tendrán un primer borrador de sus tareas y antes de que termine el año estará listo el informe “que permita tener más elementos de discusión en el futuro, posibles mejoras y datos a ser consultados”, dijo durante la presentación el catedrático de Economía Aplicada y Gestión Pública de la UNED y coordinador de la comisión, Luis Ayala, quien puso de manifiesto la “anomalía histórica que suponía la muy alta incidencia de la temporalidad”, con repercusiones sociales y económicas.
Ayala agregó que la comisión evaluará la evolución de la tasa de temporalidad, de manera agregada y por sectores y, si fuera posible, por categorías de trabajadores y de población.
Por su parte, Díaz dijo que “la reforma laboral ha sido un punto de inflexión en el derecho social porque abordó el abuso de la temporalidad y el debilitamiento de la negociación colectiva”, a la vez que puso en valor el hecho de ser la única de las cuatro grandes reformas laborales con acuerdo en el diálogo social.
Yolanda Díaz también dijo que el Gobierno se comprometió a cambiar la cultura de la temporalidad –en un momento en el que el 90% de los contratos eran temporales– firmándose cerca de un millón al mes. “Desde que se aprobó la reforma laboral (del Gobierno del PP) de 2012 y hasta 2021 se han firmado casi 186 millones de contratos y, de ellos, casi 169 millones eran temporales (el 90,7%)”, denunció la ministra, poniendo de manifiesto que “no son solo datos, son personas”.
Ello suponía que “un tercio de la población estaba atrapada en la temporalidad”, resaltó, al tiempo que denunció que “es incomprensible que el PP quiera volver al modelo anterior, de los trabajadores de usar y tirar”.
El año pasado se firmaron 6,2 millones de contratos indefinidos, el 42% del total, mientras que en 2019 apenas eran fijos el 10% de los rubricados, lo que ha supuesto que la tasa de temporalidad privada haya bajado casi 12 puntos, del 26% hasta el 12,4%, detalló la ministra Díaz.
Asimismo, recordó que ha caído la rotación laboral y ha aumentado la duración media de los contratos un 33%.
Por su parte, la CEOE acusó a Díaz de oportunismo político, formalizando esta comisión en la antesala del Primero de Mayo, y puso el foco en la elevada temporalidad pública, mientras que “las empresas españolas estamos realizando un esfuerzo de creación de empleo estable”.