El portavoz del Grupo Popular, Miguel Lorenzo, exige a Inés Rey que presione al Gobierno del Estado para que no elimine el juzgado de instrucción previsto en nuestra ciudad para ampliar la dotación de plazas de jueces de violencia sobre la mujer: “Ampliar estas plazas es necesario, más cuando desde octubre tendrán que asumir los casos de violencia sexual, pero no a costa de suprimir otro tipo de juzgados sobrecargados de trabajo como son los de instrucción”.
El Gobierno central ha aprobado transformar dos juzgados de instrucción en A Coruña y Vigo para crear las nuevas plazas de jueces de violencia. “El alcalde de Vigo ya ha manifestado públicamente su desacuerdo, mientras la de nuestra ciudad permanece callada como siempre que hay un agravio del Gobierno socialista”, asegura Lorenzo.
“Tenemos otro ejemplo de esta misma semana, cuando Inés Rey ha mantenido un silencio inadmisible ante el intento del Gobierno socialista de controlar Alvedro desde Vigo. Cada vez que tiene que defender a nuestra ciudad frente a los agravios del Gobierno de Pedro Sánchez, agacha la cabeza y mira para otro lado”, señala.
La Xunta ha enviado una carta al ministro en la que le traslada la preocupación por el impacto que esta medida tendría en la calidad del servicio judicial y le insta a mantener las dos unidades de instrucción al tiempo que se crean las nuevas secciones de violencia sobre la mujer, explican: “Instamos a Inés Rey a que envié también una carta o hable con el ministro de su partido para revertir esta decisión. Se puede porque ya rectificaron en Benidorm. Necesitamos más recursos en los juzgados especializados, pero sin debilitar la estructura judicial existente”.
A Coruña necesita todos los juzgados de instrucción actuales “y su supresión supondría un perjuicio para la ciudadanía y para el sistema judicial porque este tipo de juzgados se encuentran al límite de entrada de asuntos y también supondrá retrasos en la tramitación de diligencias penales”.