La Fundación Diego González Rivas, impulsada por el médico coruñés, contará a partir de ahora con un equipo técnico propio, formado por docentes gallegos, para garantizar el mantenimiento y la operatividad de su unidad quirúrgica móvil, una estructura de alta complejidad diseñada para llevar cirugía torácica mínimamente invasiva a zonas sin acceso a hospitales.
Víctor Paz, Leticia Conde y Alberto Pereira, profesores del ciclo de Eficiencia Energética del CIFP As Mercedes de Lugo, han sido seleccionados tras un proceso coordinado por la Fundación para asumir esta responsabilidad. Estos días han recibido formación técnica especializada en las instalaciones de ARPA EMC, empresa aragonesa que diseñó y fabricó la unidad.
Allí han trabajando directamente con los ingenieros responsables del proyecto, profundizando en los sistemas de alimentación energética fotovoltaica, climatización, gases medicinales y redes de agua autónoma, necesarios para que el quirófano móvil funcione de manera segura y autónoma en cualquier lugar del mundo.
“Hasta ahora, el acompañamiento técnico en las misiones lo realizaba el equipo de ingeniería de ARPA. Para la Fundación, es un orgullo poder delegar ese conocimiento en profesionales gallegos y contar con un equipo técnico propio que entiende y domina el funcionamiento completo de esta unidad quirúrgica tan sofisticada”, declara Carla Salgado, directora de la Fundación.
La formación presencial estaba inicialmente prevista para tres días, pero el altísimo nivel técnico del equipo docente ha sorprendido incluso al personal de ARPA: en solo una jornada han demostrado manejar con soltura todos los sistemas de la unidad quirúrgica, explican desde la Fundación.
“La formación fue breve porque no hizo falta más. Lo que para muchos sería una novedad, para ellos es una realidad cotidiana. Trabajan con estos sistemas desde hace años y, además, participan en proyectos de envergadura europea. Tenemos un talento técnico de primer nivel en Galicia”, añade Carla Salgado.
El CIFP As Mercedes, con más de 50 años de historia, es una referencia en Galicia en materia de eficiencia energética, climatización y automoción. Imparte formación especializada en tecnologías limpias, sistemas eléctricos autosuficientes, energías renovables y soluciones aplicadas a la industria actual. Muchos de estos conocimientos coinciden con los que incorpora la unidad quirúrgica móvil, lo que ha facilitado una conexión directa entre aula y acción sobre el terreno.
“Estamos encantados de aportar nuestra experiencia profesional a una misión que tiene un impacto humano real”, explica Víctor Paz, uno de los profesores seleccionados.
“Algunos de los sistemas que utilizamos en clase son los mismos que lleva esta unidad. Poder aplicarlos en una misión médica internacional es un reto técnico… y también personal. Este tipo de proyectos cambian la forma de ver el mundo. Lo que enseñamos en el aula cobra otro sentido cuando sabes que puede salvar vidas”, cuenta el docente.
Aunque los profesores participan de forma voluntaria y en su periodo de vacaciones, su implicación fue autorizada por la Dirección Xeral de Formación Profesional de la Xunta de Galicia, que valoró el alto impacto formativo y solidario del proyecto. La Fundación agradece especialmente esta colaboración, que ha permitido abrir una nueva etapa en su operativa internacional.
“Este equipo no participará solo en una misión concreta. Nuestro objetivo es que formen parte estable del dispositivo técnico que viaja con la unidad quirúrgica móvil en cada misión. Es un paso firme hacia la profesionalización gallega del proyecto”, confirma Carla Salgado.
La unidad quirúrgica móvil fue desarrollada por la Fundación en 2024 para intervenir quirúrgicamente en zonas sin hospitales ni quirófanos. Es una estructura autosuficiente de alta tecnología, con quirófano, zona de recuperación, sistemas de esterilización, energía solar y gestión hídrica autónoma. La unidad quirúrgica móvil ya ha sido utilizada en terreno y se prepara para nuevas misiones en África.