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sábado | 20 abril | 2024
El itinerario de Alvedro de cara al invierno facilita los viajes de negocios a Madrid, que habitualmente se realizan en el mismo día. Es, junto a Peinador, el aeropuerto gallego que más potencia este tipo de desplazamientos, en detrimento de Lavacolla, que pierde, a partir de noviembre, la posibilidad de aterrizar en la capital española a primera hora de la mañana.
El aeródromo coruñés cuenta con dos opciones en la temporada invernal para partir antes de las 09.00 horas, por lo que la llegada a Madrid es posible antes de las 10.00. En concreto, Iberia ofrece volar todos los días, menos los domingos, a las 06.30 horas desde Alvedro, con llegada a la capital a las 07.50. Air Europa, por su parte, despega a las 08.35 horas todos los días de la semana, para aterrizar a las 09.45. Los usuarios disponen, también, de otro enlace operado por Iberia a las 09.20, aunque la llegada se retrasaría hasta las 10.40 horas.
En la terminal de Santiago de Compostela, los trabajadores que tienen que viajar hasta Madrid afrontan un panorama muy diferente desde el próximo mes. Con los cambios realizados por las aerolíneas, la partida desde la capital gallega se pospone hasta las 09.15 con Iberia Express, excepto martes y sábados, que el primer enlace sale a las 13.30 horas. Hasta noviembre, la primera opción para viajar tenía lugar a las 06.50 horas con un vuelo de Ryanair, pero ahora ya no se pueden reservar plazas para estar ruta, que tomaba tierra en Madrid a las 08.00 de la mañana. Ahora, con el primer vuelo de la mañana a las 09.15, las personas que se desplazan por trabajo no llegarán a su destino hasta las 10.35, perdiendo parte de la jornada matinal.
El aeropuerto de Vigo sigue la misma estela que A Coruña, y es que también dispone de vuelos a las 06.30 horas operados por Iberia, a excepción de los domingos. La vuelta en el mismo día también se complica para los empresarios y trabajadores de Santiago, ya que el enlace parte desde Madrid a una hora muy temprana, lo que no permite aprovechar la tarde en la ciudad. Así, la última unión directa es a las 15.45 horas con Iberia Express, mientras que Alvedro dispone de un vuelo a las 19.40 y Vigo a las 22.10 horas.
Esto podría provocar un intercambio de tráfico entre los aeropuertos gallegos, ya que los que tengan que desplazarse, por el motivo que sea, entre una ciudad gallega hasta Madrid a primera hora de la mañana, optarían por Alvedro o Peinador. Claro está que también entra en juego la línea ferroviaria, cuyo primer trayecto, salvo el domingo, comienza a operar a las 05.08 horas desde A Coruña, con paso por Santiago a las 05.38 y con llegada prevista a las 08.45.
Alvedro es el aeropuerto con menos rutas estacionales de la red. Esto es algo positivo que se traduce en que la gran mayoría de conexiones son anuales. Con la programación de invierno cada vez más cerca, la terminal coruñesa solo se despide del enlace con Menorca, que dejó de operarse el 29 de septiembre.
Los próximos meses supondrán una transición para lo que vendrá en 2023. Las anunciadas conexiones con Ámsterdam, Milán y Ginebra harán que Alvedro pise el acelerador. Esto coincide con la pérdida de conexiones de Peinador, que pasa de tener catorce destinos directos en verano a tan solo cinco, debido a su gran cantidad de rutas estacionales.
Tras el aterrizaje del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el canciller alemán, Olaf Scholz, en la terminal coruñesa, el cielo se cubrió ayer de una intensa niebla que registró un techo de nubes inferior a los mínimos requeridos por el sistema antiniebla (ILS). Así, el vuelo de las 15.10 horas procedente de Madrid, que operaba Air Europa y que tenía previsto tomar tierra en la ciudad a las 16.20, tuvo que ser desviado, mientras que pocos minutos después, el Iberia de las 15.45 sí pudo aterrizar, al subir el techo de nubes. El Vueling que despegó de París a las 14.28 horas y que tenía que llegar a Alvedro a las 16.00, tuvo que esperar sobrevolando el espacio aéreo debido a la baja visibilidad. Finalmente logró aterrizar a las 17.09 horas. En la mañana de ayer, por el contrario, fue el aeródromo coruñés el que acogió un vuelo desviado, en este caso de Santiago. Por el mismo motivo, la niebla, un avión carguero de DHL, que cubría la ruta Vitoria-Santiago, tomó tierra finalmente en A Coruña.
