Estamos en el regimen

poco a poco hemos ido entrando en el régimen social comunista. El pensamiento único fue de Zapatero, educación para la ciudadanía en lugar de urbanidad, cuyo único logro fue resucitar las dos Españas. Al PSOE lo dejó demasiado tensionado, preparándolo para su desaparición, que se ve cercana con el “sanchismo”. Sánchez continuó con esa nueva clase de política que había inaugurado ZP, la de los que nunca habían trabajado, sin méritos y cuya vida laboral, la de todos juntos, cabe en medio folio. Después de perder 800.000 votos, antes de 24 horas estaba pactando con el que no le dejaba dormir, al igual que al 95% de los españoles. Iglesias nunca pudo tener un regalo igual, habiendo perdido también votos. El asalto al cielo había llegado y por fin entre otras cosas podía controlar la tv, su gran ilusión, tiemblen los medios privados no afines. Ahora se dirige a los niños, que no son de sus padres (Celaá). Critica al Jefe del Estado y a la Justicia y Marlaska lo justifica. 
Y llegó el virus, y la manifestación del 8M permitida, teniendo el ejemplo de Italia, pero como buen régimen puede más la ideología. Al final se decretó el estado de alarma con suspensión de derechos fundamentales, directa o indirectamente. Como es lógico y por la falta de preparación les sorprendió todo y hubo que improvisar, cogiendo al Ministro de Sanidad de cuota catalana, filósofo de profesión, pasmado. Su asesor había dicho el 7M que aquí no tendríamos apenas casos, que estaría controlado y que quien quisiera ir a la manifestación que lo hiciera. Todo se  desborda, en el peor momento nos coge con el peor gobierno y comienzan a dar palos de ciego, así compran material a empresas no homologadas, inservible. Con lo fácil que hubiera sido preguntar a Inditex (pero es el bicho, que por cierto trajo millones de material gratis y válido) o a otros empresarios españoles que comercian con China. De nuevo la ideología puede más. Como sobra el dinero, a fin de guardarse lealtades le dan a las tv fieles millones. Antes habían tratado de tapar su incompetencia con todo tipo de mensajes en las redes sociales y esas tv, diciendo que la culpa era de los recortes del PP. Lo que no pudo prever es que la mayoría les acusaran de desconocimiento y falta de previsión (Tezanos no lo preguntó). Entonces exigen sumisión a la oposición, como a sus cargos, a la que el Presidente ni llama para comunicarles las decisiones (como hacen en otros países) y cierra el Parlamento a los debates, y si critican son malos españoles. No se pone corbata negra como hizo con los atentados de París, ni un consuelo para los que fallecen solos, tan solo tuvo un detalle con los familiares de un preso y con la conferencia islámica. Aprovechando el estado de alarma, se nombra de rondón a Iglesias en el CNI, imagínense la colaboración internacional que vamos a tener. Se procede a controlarnos por los teléfonos móviles y se monitorizan nuestras conversaciones. ¿Quiénes son ellos para monitorizar nuestras conversaciones privadas y para decidir si nuestros mensajes son bulos u odios y censurarnos? 
La última ocurrencia es la renta  mínima,  efecto llamada, sobre todo con la escasez de jornaleros para la fruta. (Dónde estáis Gordillo y Cañamero?). Y el aprobado general. En circunstancias extraordinarias hay que tomar medidas extraordinarias, pero no regalar. Eso está dentro del pensamiento socialista, no te esfuerces que te apruebo, no trabajes que yo te mantengo, ya les quitaremos el dinero a los capitalistas. Tú solo vótame. Esa cultura de no premiar el esfuerzo ya sabemos a lo que condujo, parece imposible no pensar que ha llegado para quedarse, como en Cuba y Venezuela el régimen social comunista, ya tienen “Gramma” y “Pravda”.

Estamos en el regimen

Te puede interesar