Los enemigos del Puerto Exterior se quedan sin argumentos; antes de que hubiesen transcurrido 24 horas desde que encajaron el golpe que para ellos supuso la firma del acuerdo para el traslado de Repsol, se confirmó la instalación en punta Langosteira de Galigrain, uno de los principales operadores de graneles alimentarios. Es decir, otra empresa puntera en su sector se prepara ya para situar su base de operaciones en la nueva dársena, donde invertirá 4,5 millones de euros y moverá al año 100.000 toneladas de mercancías. Esos dos datos son bien elocuentes de la capacidad de Galigrain y de que el Puerto Exterior es una infraestructura imprescindible para el crecimiento económico de la comarca coruñesa. Los críticos pueden seguir insistiendo en su rechazo a Langosteria, pero cada día que pasa esa postura está más cerca del esperpento.