Julius, el mendigo alemán que durante cuatro años merodeó por las calles coruñesas, falleció ayer a los 31 años en el hospital de Lugo, en cuya unidad psiquiátrica estaba internado desde el paso mes de noviembre. Julius había sido ingresado gracias a las gestiones del departamento de Servicios Sociales de Burela, adonde había llegado tras abandonar A Coruña y dejarse ver antes en Ferrol.

 En A Coruña, todos los intentos por proporcionarle asistencia habían resultado vanos, ya que él mismo se negaba. Un juez había determinado que no se le podía forzar, ya que consideró que estaba en plenitud de facultades mentales y que disponía de una pensión que le permitía subsistir. 

No obstante, su falta de higiene y de decoro provocaba las quejas de los vecinos, aunque nunca protagonizó altercado alguno.