Una de las pocas noticias agradables que ha dejado tras de sí el pasado año es el descenso general en la siniestralidad de las carreteras gallegas. Así lo dejó claro el delegado del Gobierno, Samuel Iglesias, en la presentación de las estadísticas de 2013 para Galicia. Sin embargo, no todas las provincias se han comportado de manera positiva: la de A Coruña, ha habido que lamentar 56 víctimas mortales, 14 más que en el año 2012: un incremento del 25%. En el lado positivo, durante las fiestas no ha registrado ningún muerto por accidente de tráfico en la provincia herculina, mientras que en el resto de la comunidad ya van cuatro, en Lugo y Pontevedra.
En cuanto a los atropellos, se han contabilizado 14 en toda la comunidad autónoma. Un caso aparte, comentó Juárez, fue el del único siniestro mortal en el término municipal de A Coruña en lo que va de año: la salida de vía en la avenida de A Pasaxe a la altura de la curva de Servisa que tuvo lugar el 8 de noviembre y en el que murió una pareja de jubilados arrollados por un turismo fuera de control. “Por sus características, no se incluye en los atropellos”, explicó Juárez.
El delegado del Gobierno aclaró que todavía no se ha decidido si en ese tramo se instalará un radar o no. La jefa provincial de la DGT, María Dobarro, que estaba presente junto con el jefe accidental de Tráfico de la Guardia Civil en Galicia, el capitán Óscar Grañas, intervino para señalar que esa decisión será tomada en una junta que todavía no se ha celebrado, pero Juárez insistió en que por ese tramo han circulado “millones de vehículos” y que no se puede insinuar que sea un punto inseguro, como tampoco se puede decir que lo sean las carreteras convencionales, a pesar de que un 83% de los siniestros se producen en ellos. “Hay que tener en cuenta que tenemos 16.000 kilómetros de autopistas y autovías que Alemania. Nuestras infraestructuras terrestres son de las mejores”, recalcó Juárez.
alcoholemias
De hecho, la mayor parte de los accidentes están relacionados no con mal estado de las vías, sino de otros factores como la velocidad inadecuada (24,7%), las distracciones (19%) o el cansancio 3,3%. Pero sobre todo, por el consumo del alcohol y drogas. En total, en un 30% de los accidentes concurrían también alguna infracción.
Precisamente para combatir estos malos hábitos al volante, la DGT había celebrado a principios del mes pasado una campaña de alcoholemia a nivel estatal que en A Coruña se ha saldado con 6.533 pruebas, de las que 90 han sido positivas, a lo que hay que añadir otras 8 descubiertas en el transcurso de la investigación de una infracción y cinco en el de un accidente.
Pero a pesar de que algunas costumbres sean difíciles de cambiar, Juárez aseguró que Galicia marcha por el buen camino y recordó que en 10 años, el número de víctimas se ha reducido a menos de un tercio, la mitad en cinco años. Solo en 2012, la reducción en el número de víctimas fue del 16%. n