La Ley de Dependencia, implementada en 2007, resultó "un espejismo". A pesar de las expectativas iniciales, casi 20 años después, "se evidencian retrasos significativos en la valoración y asignación de recursos, que ya están en 16 meses de media y que en caso alguno, como están padeciendo varias familias de Oleiros, superan los 2 años de demora", según denuncia el concello de Oleiros a través de un comunicado.
La Xunta de Galicia realiza "una gestión ineficaz, que se refleja en la falta de recursos, mala planificación y una comunicación deficiente con los ayuntamientos y con las familias". Se introdujo un "bono cuidado" que, aunque parece una mejora, en realidad perpetúa desigualdades al ofrecer la misma ayuda a personas con diferentes grados de dependencia y capacidades económicas.
Además, desde el concello oleirense inciden en que se eliminaron requisitos importantes, como el informe social, lo que generó más confusión y desconfianza. Los ayuntamientos son los que tienen que asumir las consecuencias de esta política tan desconsiderada con el segmento ciudadano más vulnerable. En Oleiros, en concreto, se incrementaron recientemente los recursos para paliar las estreiteces generadas por la Xunta, para garantizar la calidad del servicio de ayuda en el hogar, no siendo una competencia exclusiva municipal. El gasto anual del Ayuntamiento de Oleiros en Servicios Sociales es Igualdad supera los 4 millones de euros.