El concejal compostelano de Medio Rural, José Manuel Pichel, ha presentado este miércoles su dimisión tras trascender, a raíz de una denuncia de la oposición, que el Ayuntamiento de Santiago alquiló una nave industrial para su departamento a una empresa a la que había estado vinculado.
"En ningún momento actué de mala fe", ha dicho el ya exedil, alegando que no tuvo intención de obtener de esta operación "ningún tipo de rédito" ni "enriquecimiento personal", al tiempo que ha negado que haya intentado "ocultar" algo detrás de esta contratación, un alquiler con un pago de 5.000 euros al mes por una nave industrial situada en el Polígono de Costa Vella a la que se trasladó el departamento de Parques y Jardines tras la demolición de la antigua estación de autobuses de Santiago, donde se ubicaba previamente. "Lo único que buscaba era garantizar el correcto y normal funcionamiento de los servicios públicos", ha señalado.
No obstante, Pichel ha reconocido que cometió "un error considerable" en el proceso, al "no haber comunicado al alcalde" y a la Xunta de Goberno que dio luz verde a la operación "que había tenido una relación accionarial con la empresa propietaria del inmueble", Desproi S.L.
Poco más de 48 horas después de que saltase la información a raíz de una denuncia de Compostela Aberta, Pichel ha comunicado su "decisión personal" de "renunciar al cargo de concejal", una cuestión que ha planteado como un acto de "honestidad" consigo mismo y "con los vecinos que apoyaron este proyecto".
"No puedo permitir que se cuestione la honorabilidad de este gobierno", ha dicho el exedil, para quien la acción municipal "no se merece quedar empañada por una acción individual que la clase política decidió aprovechar como pedrada a un gobierno solvente".
"Entré en política para ser útil a los vecinos de Santiago, trabajé cada día y me voy con la satisfacción y la conciencia tranquila", ha dicho ante los medios, argumentando que "lo útil" en este momento es marcharse "sin hacer ruido para ensordecer un ruido molesto, interesado, partidista, sin fundamento real" y "sin compasión ni empatía". "A veces para ganar hay que retirarse. Yo me retiro porque sé que quien gana es el Ayuntamiento de Santiago", ha apostillado.
Pichel, que ha comenzado la rueda de prensa agradeciendo el "apoyo y comprensión" a sus compañeros del equipo de gobierno, ha contado que este martes puso a disposición del secretario general del ayuntamiento "toda la documentación relativa a la empresa" de la que es administrador único --y que se encuentra inactiva mientras ostenta un cargo público-- para conocer su punto de vista.
Ante los medios, ha leído las conclusiones del informe del secretario general, que apuntan a que "las circunstancias concurrentes en el momento de adjudicar el contrato no determinan la concurrencia de una prohibición para contratar con la empresa Desproi S.L." ni "una situación de incompatibilidad del concejal". No obstante, el secretario si añade que "puede considerarse la existencia de un conflicto de intereses aparente" en este caso.
José Manuel Pichel ha admitido que fue administrador único de Desproi hasta 2016 y, a partir de esa fecha, se mantuvo en el accionariado a través de otra empresa de la que fue administrador único hasta su entrada en el ayuntamiento, Servicios Técnicos Gaia. Las participaciones que esta compañía tenía en Desproi no fueron vendidas hasta septiembre de 2021.