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sábado | 20 abril | 2024
Después de repasar las propuestas electorales de los partidos que ya tienen representación en la corporación municipal, la Asociación de Emprendedores de Galicia (Ascega) citó ayer a miembros de las siete formaciones que se han postulado a las próximas elecciones. Con todo tipo de ideologías sobre la palestra, el debate fue respetuoso pero subió de tono para utilizar de principio a fin la falta de apoyo –o la promesa de él– al pequeño comercio y la lentitud en la tramitación de las licencias como armas arrojadizas entre políticos.
Todos los presentes –en las filas de la Marea Atlántica, el PP, el PSOE, el BNG, Ciudadanos, Alternativa dos Veciños y Democracia Coruñesa– tuvieron una exposición argumental al principio, que ya implicó la apertura de brechas sobre la forma de ver las medidas. Tanto el candidato nacionalista a la Alcaldía, Francisco Jorquera, como el concejal popular, Roberto Coira, advirtieron de los problemas que tienen las tiendas de proximidad y “la inversión privada” con el actual Gobierno local y contrapusieron sus ideas.
Para Jorquera los mercados municipales deben convertirse “en centros de dinamización” de los barrios, algo que hasta ahora no se ha conseguido. También opinó que los comerciantes tienen que recibir formación para competir con el comercio online y exigió –al tiempo que comprometió– “unha aposta moito máis decidida pola rehabilitación”.
En su turno de palabra, Coira quiso dejar claro que el Ayuntamiento no se puede escudar en la falta de competencias porque sí puede “facilitar y crear un marco adecuado para que las empresas puedan realizar sus actividades”.
Aludiendo al dinero que ha dejado la Marea sin ejecutar, anunció una reducción de impuestos porque hay “colchón” para facilitar un salvavidas a los comercios. También lamentó que las constructoras se vayan a municipios limítrofes porque ahora les “boicotean la inversión privada”.
Pese a los ataques, el actual concejal de Empleo y Economía Social –y representante también de las áreas de Comercio y Turismo–, Alberto Lema, defendió que frente a la construcción tocaba asumir un nuevo modelo de ciudad vinculado a la innovación y “apostando polo comercio de proximidade”, aunque los empresarios del sector insisten habitualmente en que no lo han sentido así. El edil remarcó lo hecho en estos cuatro años hablando del Pacto Local polo Emprego o el Plan Estratégico de Turismo y explicó que la nueva planificación de A Coruña es “a longo prazo”.
No obstante, el número dos de la lista del PSOE a los comicios, José Manuel Lage Tuñas, le reprochó que no se hubiesen llevado a cabo medidas de impulso comercial como la reforma del mercado de Santa Lucía. Respecto a las licencias exigió “agilidad” porque si no llegan a tomarse medidas tangibles lo único que hay son “discursos vacíos”.
Molesto con las cuestiones que le plantearon desde distintos frentes, Lema avisó de que no deberían dar lecciones porque, sin ir más lejos, los ritmos de administraciones locales precedentes harán que “haxa que pagar 45 millóns de euros en multas, sancións e compensacións” por errores en el Conde de Fenosa, Someso... El socialista contraatacó lamentando que Lema buscase en el pasado para llenar su discurso, pero no en su pasado como gestor. Respecto a todo este entramado de acusaciones mutuas, los asistentes en la sala fueron muy críticos.
Incluso reprocharon ciertas consideraciones de partidos que por el momento no tienen representación en María Pita pero que también fueron invitados a debatir el futuro que necesita la ciudad tales como Alternativa dos Veciños, Democracia Coruñesa (una formación impulsada por el anterior líder de Ciudadanos a nivel local y antiguo presidente de una asociación vecinal y comercial, Miguel Ángel Rosende), y Ciudadanos.
