Los vecinos de A Galera, afectados por la ‘invasión’ de ocas para la que el Ayuntamiento de Betanzos solicita la colaboración de la Xunta, denuncian que los excrementos y, sobre todo, la comida de depositan algunos ciudadanos para alimentarlas, han empezado a atraer ratas a la zona, lo que complica todavía más la situación de insalubrilidad con la que tienen que convivir a diario los residentes en este céntrico paseo, paralelo al Mendo. Además,  a esto se suma el ruido que hacen y en varias ocasiones atacaron a los vecinos a la hora de acceder a sus viviendas en A Galera. 

Los denunciantes ruegan que no se les deje comida de ningún tipo, al tiempo que urgen a limpiar la zona “porque cuando empiece el calor esto va a ser todavía más insoportable”, a la espera de conocer qué medidas adoptan tanto Betanzos como la Xunta. 
 

La semana pasada, el área municipal de Medio Ambiente trasladó a la Xefatura Territorial de Patrimonio Natural de A Coruña los problemas que padecen los vecinos, especialmente los que residen en los números 2, 4, 6, 8 y 10. Allí las ocas “están generando problemas de salubridad, al dejar sucio el entorno, tanto las aceras como ñas entradas a  los portales”, detallaron desde el departamento de Andrés Hermida. l