La vida fue un carnaval para los pubs y discotecas de A Coruña

La vida fue un carnaval para los pubs y discotecas de A Coruña
La sala Pelícano llenó hasta en su fiesta infantil

Moverse por ciertas calles de A Coruña entre el viernes y martes resultó una odisea y un desafío, ya que muchas de ellas, especialmente en la zona centro, sobrepasaron su capacidad y desafiaron las leyes de la física. Se trata del mejor termómetro y anticipo de lo que acostumbra a ser sinónimo de felicidad tanto para la hostelería como sobre todo para un ocio nocturno. Los pubs y discotecas se convirtieron en el refugio de las decenas de miles de personas sedientas de fiesta y que extendieron la misma hasta que lo permitió la medida de gracia permitida por el Ayuntamiento. Según los empresarios los números de 2023 quedaron también pulverizados. 


La que probablemente fue la programación más ecléctica, diversa y ambiciosa del grupo Pelícano obtuvo una respuesta proporcional por parte de una clientela heterogénea y que acudió a todas y cada de las propuesta en forma de multitud. Desde la fiesta infantil del Domingo de Carnaval a la Wake Up del lunes o los distintos eventos de la sala Inn colgaron el cartel de no hay billetes o, lo que es lo mismo, miles y miles de clientes durante cada una de las seis noches. Su gerente, Luis Diz, no oculta la satisfacción por lo que considera un año especialmente provechoso. “Fue muy positivo, mejor que 2023”, subraya el hostelero respecto a una edición que ya había supuesto un récord per se. Según el también presidente de Galicia de Noite la clave está en darle a los clientes algo diferente, por lo que no cree que el camino hacia Semana Santa vaya a ser demasiado traumático. “La gente necesita que se le ofrezcan cosas para salir y Pelícano tiene un marzo explosivo, así como Inn, donde los conciertos han vendido ya casi todo le aforo”, subraya Diz, ilusionado también por la apuesta de organizar la fiesta electrónica en la estación de esquí de La Pinilla (Segovia). 


No es La Marina especialista en máscaras y choqueiros, pero incluso en una zona tradicionalmente de ‘tardeo’ y desayunos muchos locales se convirtieron en parada hasta altas horas de la madrugada. “La tendencia sigue en alza en este año y el Martes se nos juntaron el buen clima, un festivo en el área y un barco en el muelle”, indica el presidente de los hosteleros, Alberto Boquete. Con tres locales en esa misma avenida, Antonio Ruiz también habla de seis días inolvidables para Quai, La Calle y Piccadilly. “En general la gente respondió muy bien y la posibilidad de extender el horario fue beneficiosa para todos”, dice.


Sin incidentes 

A pesar de que acostumbra a vincularse los actos masivos o incluso la fiesta popular con intranquilidad o inseguridad, otro de los puntos que destacan los hosteleros es la ausencia de incidentes. “No es sólo que se mejoraran los números de otros años, es que hay que agradecer la falta de incidencias en seis noches”, recuerda Emilio Ron, gerente del Cine París


Además, al igual que otros compañeros, cree que el hecho de que se generalizase el festivo del Martes del Carnaval se hizo notar en las calles, junto a la llegada de muchos turistas

La vida fue un carnaval para los pubs y discotecas de A Coruña

Te puede interesar