De oca a oca y ahorro porque me toca

De oca a oca  y ahorro porque me toca
Alumnos del colegio San Francisco Javier juegan al Grand Prix Financiero | pedro puig

Es la misma aula de todos los días, pero su aspecto es diferente. No hay pupitres, ni sillas, y la pizarra es irrelevante. Los alumnos están sentados en el suelo en torno a un tablero que ocupa buena parte del espacio, en lo que parece un juego similar al de la oca, tradicional donde los haya. También hay un dado gigante. Y es que, en la mañana de ayer, los alumnos de Quinto curso del colegio San Francisco Javier salieron de su rutina habitual, y durante hora y media, aprendieron educación financiera. Lo hicieron de la mano de Abanca, y de la forma en la que mejor se aprende: jugando. En este caso, al Grand Prix Financiero.


“É importante que os rapaces comprendan que os cartos non saen da nada, senón que hai que gañalos e hai que saber empregalos”, explica Isabel Vázquez, la tutora del grupo, que admite que este tipo de actividades sirven que los niños puedan aprender de una forma diferente a la habitual. “Para eles, supón unha actividade divertida, pero están adquirindo novos coñecementos sen darse conta”, explica.

 

“É importante que os rapaces comprendan que non sempre se lles pode regalar todo o que piden, e nón é por capricho dos pais, senón porque hai gastos que son máis urxentes”

 


Vanessa Sende es la coordinadora de esta actividad, en la que los niños tienen que ir superando las casillas del juego, y en cada una de ellas, se ven obligados a afrontar diferentes gastos, que deben abonar con el dinero ficticio que se les proporciona al empezar la partida. “Hai casillas nas que teñen que pagar porque teñen que encher a neveira, botar gasolina, pagar a factura do móvil… En definitiva, afrontar gastos que son habituais en calquera familia, pero dos que eles non sempre son conscientes”, explica Vanessa. “Sempre hai algún neno que che di que el nunca paga nada, senón que o fan os seus país. Así, aprenden que todo o que teñen ten un prezo e non sempre é doado asumilo”, comenta.


Durante la actividad de ayer, Vanessa estuvo acompañada en su labor pedagógica por Xiana Méndez, educadora de la actividad. Entre las dos, lograron que los niños aprendieran y se llevasen importantes lecciones bajo el brazo. “Moitos alumnos se queixaban porque caían en casillas nas que tiñan que pagar máis cartos que outros compañeiros. Pero é que a vida é así. Non todo o mundo ten sempre as mesmas circunstancias ou a mesma sorte”, explica Sende.


“O importante é que os rapaces saiban que, en ocasións, os pais non lles regalan todo o que piden, pero non é por capricho, senón porque tiveron que afrontar gastos máis urxentes. Hai familias que chegan a final de mes debendo cartos, e deben entendelo de cara ao futuro”, finaliza la coordinadora de la actividad. 

De oca a oca y ahorro porque me toca

Te puede interesar