El árbol más antiguo de A Coruña tiene sus raíces en Nueva Zelanda

El árbol más antiguo de A Coruña tiene sus raíces en Nueva Zelanda
El metrosidero se alza en el patio del edificio de la Policía Local | AEC

Antaño existía una fábrica de jabón que se alza en el lugar denominado calle de los Huertos 1, donde se pretende establecer un Asilo de Mendicidad en 1884. Mediante una escritura otorgada por Manuel Banet Fernández, como apoderado de Rafaela Tenreiro, a favor del Ayuntamiento coruñés, ante el notario José Asensio y adquirida en 29 de mayo de 1889. Variando el motivo, al rehacer la edificación entre 1900 y 1902 en que se hace la obra de reforma y ampliación del hospitalillo, al que se le denomina en su inicio de la calle Huertos, que se destinará a enfermedades infecciosas y la extensión de la finca abarca 7.007,11 metros cuadrados.


Esta edificación se haya con entrada por la Calle Tui 21, antaño la tenía por la calle de Miguel Servet. Se levanta para acoger a enfermos infecciosos, pero al parecer también con síntomas de demencia. En sus inicios se le denomina como “Hospital de enfermedades contagiosas”, aunque en su reglamento se le nombra como “guardián de dementes”, pasando finalmente a denominarse “Hospital de San José”..

 


Traslado del hospitalillo


Este hospitalillo acaba siendo trasladado a la Clínica Labaca y se inicia la obra de la demolición del antiguo edificio, en donde se instala la “Casa de Socorro” y del Servicio Municipal de Ambulancias y Camilleros, obra que se proyecta en el mes de diciembre de 1956 para instalar en este lugar la Casa de Socorro.

 

El 31 de diciembre de 1999 la ciudad plantó otro ejemplar en el Cantón Grande como símbolo del nuevo milenio

 


¿Cómo llegó el árbol a ese lugar? Una pregunta con difícil respuesta, pero posiblemente haya más de una razón  para que esté allí. Antes de que existiese este hospitalillo para gente infecciosa y también años más tarde su Casa de Socorro, hubo en su solar una fábrica de Jabón. Entonces eran comunes estas fábricas, al igual que las de velas, ya que no había luz eléctrica. Los terrenos fueron adquiridos a partir de 1818 por Camilo Gamboa, la cual estaba cerrada con una muralla en su extensión en el barrio de Santo Tomás. En 1821 consta como comerciante y residente en la calle del Muelle 1. Según la escritura de 19 de febrero de 1818, dice; “Que la casa 51 del terreno que se halla delante de ella y de la huerta cerrada y amurallada que le sigue, de que se están fabricando de nuevo varios edificios para la fábrica de jabón, que se establece en la misma, de mucho valor”.

 


Movimientos en el siglo XIX


Esta fábrica consta en 1830, a nombre de Pedro López Penilla, natural de Moneo-Villarcayo (Castilla) Estableciéndose bajo la denominación de Álvarez e hijo y Penilla, dedicándose a la elaboración de jabón pinta y blanco, desaparece en 1862. En 1865 se lleva a efecto una escritura de venta de Álvarez e hijo y Penilla a Manuel Banet Fernández y Diego Moreno, la que se otorgó ante el notario Francisco Chaves y Alcalde..


De modo que es posible que este metrosidero o árbol de hierro, pudiese ser importado por dicho industrial entre los años de 1818-1820 y plantado en el lugar. En la actualidad estaría entorno a los 200 años de vida. No es el único ejemplar que existe en la ciudad. En el parque de Méndez Núñez, hay dos, otro plantado, en la época del alcalde Francisco Vázquez en el Cantón Grande, frente al extinto Cine Avenida, otro ejemplar en los jardines de la Real Maestranza, junto a los restos de una muralla cerca del paseo marítimo. Tres ejemplares a la entrada de la Hípica y en el paseo del Metrosidero, que alcanza a la entrada de la calle de Orillamar. Hay un buen número de este tipo de árboles de diversos tamaños y alturas. Añadir los que se hallan en el Paseo Marítimo de Riazor, que acaban convirtiéndose en el símbolo natural de A Coruña.

 

El metrosidero está protegido por la Xunta y cualquier examen debe contar con su permiso y el del Ayuntamiento 


El situado en el patio de la Policía Local cuenta con dos troncos que rondan los ocho metros de circunferencia, una altura que supera los 22 y una copa de unos 25 metros de diámetro. Uno de los dos, situados en el Parque de Méndez Núñez tiene 22 metros de altura, por cinco de diámetro y su copa oscila sobre 15 metros. El otro está situado a escasa distancia del monumento a Concepción Arenal. Es de idénticas cualidades que el anterior y el siguiente ejemplar en los jardines de la Real Maestranza, próximo a las instalaciones de la Hípica, tiene una extensión similar a estos últimos y finalmente el plantado por Francisco Vázquez en el Cantón Grande en 1999 es más, pequeño, a medida que pase el tiempo ira creciendo y se hará mayor. Este arbolito tiene a su pié dos placas conmemorativas en gallego y castellano, que indica: “Os coruñeses prantaron este metrosidero o 31 do Nadal de 1999 como símbolo do novo Milenio”.


La Policía Local coruñesa tiene este ejemplar ocupando casi toda la extensión del patio del cuartel en que están ubicados. Pese a la estrechez que pasan, se sienten muy orgullosos de trabajar a la sombra del mismo, llamado también “árbol das meigas” y “árbol de hierro”. Se trata de una especie venerada en aquel lugar de Oceanía de donde procede y se denomina “Pohutukaba”, el cual alcanza gran altura. La duda sigue estando de cómo llegó a este lugar desde un punto tan apartado, esta especie se haya esparcida por casi todos los países del mundo. Nueva Zelanda es su lugar de origen, cuyos navegantes españoles pasaron por esa ruta, aunque no llegaron a conquistarla, estaban más interesados en la navegación que hacían los portugueses en la procura de especias. Los holandeses arriban a este lugar en 1642 y tampoco se hacen con los derechos de dominio y en 1769 los ingleses en su periodo de mayor expansión territorial y al mando de la expedición de James Cook, la incorpora a la Corona Británica.


Este ejemplar está protegido por la Comunidad gallega y cualquier examen tiene que contar con el permiso de Ayuntamiento y de la Xunta de Galicia. Luce con identidad un amuleto colocado en 2013, del escultor Kerry Strongman, con el que ningún otro ejemplar fue distinguido y solo lo llevan los jefes de las tribus Maoríes. l

El árbol más antiguo de A Coruña tiene sus raíces en Nueva Zelanda

Te puede interesar