Que los precios han subido es una obviedad. No solo porque lo diga el Índice de Precios al Consumo (IPC), sino porque es notorio que el coste de la vida se ha ido incrementando poco a poco -a veces de manera acelerada, otras veces de forma más lenta- hasta considerar normales unos precios que hasta hace nada podrían resultar insultantemente altos.
Uno de los sectores en los que esto es más notorio es en el de la música. Los conciertos han sufrido un incremento de precios tan importante que las comparativas son más que odiosas. Si para ejemplificar el cambio del coste de la vida entre los años 90 y la llegada del euro se suele usar el símil de cuando los 'Todo a 100' (pesetas) se convirtieron de la noche al día en 'Todo a 1' (euro) -es decir, de 100 pesetas a 166,386, que fue el cambio oficial establecido-, en el caso de los conciertos podríamos hacer algo semejante: ¿a cuántos conciertos de los años 90 en A Coruña podríamos ir con lo que nos cuesta ahora una entrada?
Dos de los próximos grandes conciertos del Coliseum, para los que ya no hay entradas disponibles, son los de Joaquín Sabina (18 y 20 de septiembre) y Duki (12 de octubre). Uno, un artista más que consagrado, el otro, un referente de la música urbana actual. Pero los dos han colgado el cartel de 'no hay billetes', con entradas que en el caso de Sabina llegaban a los 145 y 124 euros y en el de Duki, a 87.
Con el dinero que cuesta ver a Sabina, en los años 90 se podrían haber comprado entradas para los conciertos, por ejemplo, de Los Suaves, La Fura dels Baus, UB40, Héroes del Silencio y Prince, además del abono del Concierto de los Mil Años de Riazor (total, 121 euros, al cambio). Sin este último abono, saldría la cifra necesaria para pagar la entrada más cara para acceder al evento de Duki (total, 85 euros, al cambio).
Porque ver a Los Suaves en el Coliseum en abril de 1994 costaba entre 6 y 7,80 euros al cambio (1.000 pesetas en entrada anticipada y 1.300 en taquilla); La Fura dels Baus (julio de 1997), en el mismo recinto, costaba de 12 a 15 euros (2.000 - 2.500 pesetas); y otras 2.000 pesetas era el precio que constaba en las entradas para ver a UB40 (noviembre de 1993) y Héroes del Silencio (junio de 1996).
El Playa Club trajo en marzo de 1998 a Ocean Colour Scene, con entradas que se vendieron a 2.500 pesetas (15 euros), mientras que en el recinto del colegio Santa María del Mar tocó un grandísimo como Prince en julio de 1990, que cobró los tickets a 4.000 pesetas (24 euros).
Mención aparte merece el denominado 'Concierto de los Mil Años', que en julio de 1993 trajo a Riazor, en un festival multitudinario, a figuras de la talla de Bob Dylan, The Kinks, Robert Plant y John Mayall. ¿El precio del abono para los tres días del conciertos?: 6.000 pesetas (36 euros), lejos de los 83 euros que cuestan ahora los dos días del Morriña Fest o los 55 del Recorda Fest.