El Ayuntamiento de A Coruña ha completado las obras de mejora de accesibilidad en 16 paradas de autobús urbano, dentro de un plan financiado por los fondos europeos Next Generation y con una inversión de 700.000 euros. La actuación forma parte de una estrategia municipal que continuará en próximas fases hasta lograr una red de transporte público completamente adaptada.
Los trabajos se han centrado en la elevación de plataformas, la instalación de pavimento podotáctil, la reconfiguración de espacios de espera y la mejora de la señalización, con el objetivo de facilitar el uso del autobús a personas con movilidad reducida, personas mayores o familias con carritos.
La alcaldesa, Inés Rey, destacó que “avanzar en accesibilidad es avanzar en derechos”, subrayando que esta intervención refuerza el compromiso del Gobierno local con una ciudad “más igualitaria, amable y pensada para todas y todos”.
Por su parte, la concejala de Infraestructuras y Movilidad, Noemí Díaz, señaló que se trata de un plan “basado en una planificación rigurosa, en la que se han analizado las condiciones técnicas y sociales de cada parada, priorizando aquellas con mayor necesidad, impacto o volumen de uso”.
Las 16 paradas mejoradas están distribuidas por varios barrios coruñeses, como Os Mallos, Monte Alto, Labañou, Os Rosales, Cuatro Caminos y Castrillón, permitiendo corregir deficiencias históricas y garantizar un acceso más cómodo y seguro al transporte público.
Desde 2019, el Gobierno municipal ha ejecutado actuaciones en más de 60 paradas de autobús, con el objetivo de alcanzar una accesibilidad universal en toda la red. Las mejoras seguirán extendiéndose en los próximos meses, atendiendo a criterios técnicos y de prioridad social.
“Nuestra prioridad es garantizar que cualquier persona pueda coger el autobús sin encontrarse barreras. La ciudad debe avanzar con equidad, también desde el punto de vista de la movilidad”, concluyó Noemí Díaz.