Las franjas horarias son cosa de la fase 0, pasadas de moda

Las franjas horarias son cosa de la fase 0, pasadas de moda

menudo exitazo lo de las franjas horarias en la fase 1. Solo las han cumplido los que salieron a hacer deporte a primera hora de la mañana, y por obligación, que luego trabajaban o tenían hijos que atender. El resto ha sido un batiburrillo de niños en bicicleta alrededor de abuelos tomando el sol en un banco, mujeres que volvían con bolsas de la compra desde la otra punta de la ciudad y señores paseando con el pan debajo del brazo. Al final, lo más fácil para no encontrarse en medio de un enjambre de personas era irse a una terraza con sus mesitas separadas y sus camareros a distancia prudencial. Eso o no salir de casa como si estuviésemos en un domingo de verano, que por más que en algunas calles pareciese que había romería se supone que aún estamos en estado de alarma. Y es por algo. Como no reconduzcan pronto la situación los que tienen que tomar las decisiones acabamos todos contagiados o de vuelta al confinamiento absoluto. Y de elegir, mejor lo segundo. FOTO: una terraza de tarragona, concurrida, como todas las que abrieron ayer | efe

Las franjas horarias son cosa de la fase 0, pasadas de moda

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