El de ayer tuvo que ser uno de esos días que Torra habrá marcado en rojo en su calendario. Jamás podrá olvidar el día que salió a la palestra para pedir a todos los catalanes que no viajen a Madrid. Por fin el Covid-19 le dio la excusa perfecta para atacar a su enemigo más odiado, porque, no lo olvidemos, para los secesionistas Madrid es el demonio, por todo. Lo es porque allí reside el Gobierno que les roba y lo es porque es la imagen de este Estado opresor al que quieren derrotar. Y para guinda, pidió que el que quiera salir de allí se haga un test. Vamos, lo dicho, un día que le va a ser muy difícil poder olvidar. FOTO: quim torra | aec