10º-19º
viernes | 19 abril | 2024
Los vecinos de Matogrande ven en la ronda de Camilo José Cela un grave peligro para los peatones. Y no precisamente por las propias aceras o pasos destinados a los caminantes, sino por las consecuencias de los choques y accidentes de coches en la propia carretera. Es por ello que han pedido al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana que instale una barrera protectora para los peatones en esa vía, que se corresponde con la AC-10.
Según señala Esteban Velasco, presidente de la Asociación de Vecinos de Matrogrande, tras ocurrir varios accidentes “en los que los coches se metieron en la acera” han solicitado al departamento que dirige José Luis Ábalos que establezca una barrera de protección en la zona, que no solo beneficiaría a los residentes en Matogrande, sino también a los del Barrio de las Flores, que es el otro que limita con la carretera de la ronda de Camilo José Cela, que bordea ambos distritos.
“La gente que cruza por el paso de peatones –que se encuentra en esta zona de peligrosidad viaria, en la que también hay una marquesina del autobús urbano– se enfrenta a un peligro diario, porque aunque la velocidad marcada es de 50, los conductores pasan a 90 kilómetros por hora”, critica el dirigente vecinal.
Esteban Velasco incide en que en estos accidentes, por el poco espacio que hay y la propia configuración de la vía, los coches terminan invadiendo la acera, por lo que los vehículos podrían llegar a atropellar peatones en caso de accidente. “En estos accidentes que hubo, si llega a haber alguien esperando para cruzar, el coche lo habría matado”, señala.
Petición
Es por ello que desde la asociación se dirigieron la pasada semana al Ministerio para pedirle una vallas de protección doble, pero que también cuenten con quitamiedos destinados a proteger a los motoristas y que estos no sufran daños si caen contra ellas.
“Estas vallas pueden soportar perfectamente los golpes y serían una gran necesidad porque ahora mismo no hay nada que indique la atención a los peatones”, explica Velasco, convencido que con estas protecciones se evitarán graves consecuencias en el futuro.
