Romano

En el Rosalía, buena entrada destacando la afluencia de famosos de la escena gallega, la compañía Espello cóncavo estrenó “Romano”, de Lino Braxe. Drama que describe la nación codificadora del Derecho, asentada en principios de libertad aunque existiese la esclavitud y ciudadanos de segunda. El autor asume también la dirección escénica con simplista mobiliario y telón al foro definido por iluminación roja. Interesante puzzle dramático desde el hermoso canto de Laura Sarasola –voz de Patricia– y recital de Rita Gasalla –voz de Sibila– hasta la música en vivo de la trompetista Alma Sarasola. Valen las máscaras de María Braxe, el vestuario de Paula Meléndrez y Margarita Chas y luz de Antonio Simón.
Personajes testimoniales a cargo de Manuela Varela y Xosé Vilarelle interpretando varios roles en apoyo del protagonista. Porque la obra no pasa de ser un monólogo donde Miguel Pernas encarna con acierto un senador que ha escrito un poema que ha suscitado la persecución de Tiberio. Fluctúan sobre la sigla SPQR nombres claves en el país latino, Octavio Augusto, Calígula, Claudio… Las victorias imperiales y la desgracia de los legionarios cuando regresan a sus hogares, pobres, enfermos y tullidos. La razón de Estado aplastando el talento. Capri, Tarento, Eneas y Virgilio. Pompeya y Herculano. Una terraza desde donde contemplar el puerto y navíos que comercian desde otras naciones… Superación de estigmas y grandilocuencia del gesto sublime.
Todo esto hace plausible Pernas: dominante, armónico, voz grave y redonda, elegancia de la toga cuando el manto se prolonga como prenda principal. Hace años aludí a las manos de este gran actor. Hoy me ratifico… Ante los aplausos clamorosos, los cómicos, acompañados por un Lino Braxe muy emocionado, saludaron desde el palco escénico.