ESPÍRITU DE LA NAVIDAD

De nuevo el Concierto de Navidad –patrocinado por Gas Natural-Fenosa– ayudó a entender este espíritu navideño que, año tras año, los medios se empeñan en hacernos creer que existe y que es real. Desde luego, siempre que llegamos a diciembre, parece indicado si bien no llegar a tanto como al acto de contrición o propósito de enmienda, sí hacer un hueco para la reflexión existencialista.
Lo primero que comprobamos en el concierto del sábado fue cómo los políticos de todos los signos se afanaban en hacer relaciones sociales con una amabilidad que resultaba, cuanto menos, chocante. ¿Tendrán para ellos más importancia las aproximaciones sociales que la sencillez de disfrutar de la música con su altísima carga de valores estéticos y espirituales? ¿Habrán tocado fondo en materia de credibilidad hasta el punto de tener que buscar manos que estrechar pretendiendo mostrar así un optimismo que nada tiene de real y tratar con ello de dar muestras de normalidad?
Sea como fuere, la elección del repertorio a interpretar no pudo estar mejor: un programa de “highlights” para todos los gustos. Esto no es displicente, porque a todos nos gusta recordar pasajes conocidos de la historia de la música. Además, ayudan a que el público no habitual se aproxime a ella, la valore y llegue a comprenderla mejor. Conseguido este objetivo, todos juntos, fuimos disfrutando como supimos o pudimos, y esto sí puede ser que forme parte del espíritu navideño, o encuentro de las personas en puntos de referencia concretos. Rossini, Corelli, Mozart, Bernstein, Debussy, Dvórak y Strauss fueron interpretados por la OSG y dirigidos por Paul Goodwin, haciendo las delicias del público. Aunque esperábamos bastante más del director, no reprochamos nada en su oficio, pero sí en su interpretación, pues fue distante, sin profundidad y exenta de calidez musical.
Este País, inmenso en capacidades artísticas y nefasto en la gestión de las mismas, algún día vibrará con la música por cuestiones de fondo. Ese día habremos ganado una batalla cultural histórica contra nosotros mismos y estaremos en posición de discutir con nuestros vecinos del norte en condiciones parecidas. 

ESPÍRITU DE LA NAVIDAD

Te puede interesar