Críticos con Alvariño se reúnen pese a la anulación de la junta para pedir el cese de su cargo

Los presidentes de las confederaciones provinciales de A Coruña, Lugo y Ourense, miembros de la de Pontevedra y de las organizaciones sectoriales se reunieron ayer en la sede de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) en Santiago, donde estaba convocada una junta directiva que el presidente de la patronal gallega, José Manuel Fernández Alvariño, desconvocó después de anunciar su decisión de convocar elecciones el pasado viernes.
Así, pese a la suspensión de la directiva, integrantes de la junta mantuvieron un encuentro, después de la celebración de una comisión de economía en la que su presidente, José Manuel Pérez Canal (a su vez máximo representante de los empresarios ourensanos) dimitió de su cargo al frente de este foro, creado por Alvariño para tratar de salvar el bloqueo a las cuentas de 2014 de la entidad. Al término, las sectoriales remitieron un comunicado en el que adjuntan el acuerdo alcanzado “unánimemente” en esta jornada, y que en primer lugar manifiesta la “sorpresa” y “rechazo” a “la actitud” del presidente de la CEG “de anular ayer mismo la junta directiva convocada para por la tarde, y convocar rueda de prensa hoy para hablar de convocatoria de elecciones, al margen de los órganos estatutariamente competentes”.
Asimismo, los críticos con la gestión de Alvariño instan a la “convocatoria urgente y conjunta del comité ejecutivo y junta directiva de la CEG para el próximo 27 de noviembre”.
Para ese día también demandan convocar la asamblea general extraordinaria de la patronal gallega, “a efectos de la aplicación del artículo 18.5” de sus estatutos, “relativos al cese del cargo del presidente”, explican.
Por su parte, Alvariño anunció ayer que convocará “de inmediato” a la junta directiva de la CEG para evaluar el proceso electoral, y estima que los comicios se podrán celebrar en enero. Ha encargado un informe jurídico para tener claro el calendario.