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jueves | 25 abril | 2024
Galicia sigue perdiendo población y, según la estadística del padrón continuo que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE), se sitúa entre las comunidades que más habitantes han dejado de estar inscritos, un total de 7.369 personas.
Además, el peso de la inmigración en la comunidad gallega sigue siendo escaso, ya que apenas el 3,4% de la población empadronada es de origen extranjero, solo superada por la situación de Extremadura, en que este colectivo apenas es el 2,9 por ciento. En el listado de comunidades, Galicia se sitúa como quinta en el conjunto del Estado con mayor población, supera por Andalucía (8.379.000), Cataluña (7.596.000), Madrid (6.576.000) y Comunidad Valenciana (4.959.000).
Concretamente, los datos de la estadística revelan que Galicia contó a 1 de enero de 2018 un total de 2.700.970 habitantes, 7.369 menos que en 2017, es decir, un 0,3% menos. En cuanto al total de España, las mayores reducciones se producen en Castilla y León (18.151 personas menos), Extremadura (7.861 menos) y Galicia (7.369 menos). De los 313 ayuntamientos con los que cuenta la comunidad gallega, 33 son de menos de mil habitantes y 224 se encuentran en la franja de entre los 1.001 y los 10.000 habitantes.
Solo cuatro municipios están entre los 50.001 y los 100.000 (Ferrol, Lugo, Santiago y Pontevedra) y únicamente tres superan los 100.000 habitantes: Vigo, A Coruña y Ourense. Además, un total de 49 municipios gallegos tienen entre 10.001 y 50.000 habitantes, lo que se conocen como localidades intermedias en Galicia, como pueden ser Vilagarcía de Arousa y Narón. En este grupo de municipios vive la mayor parte de los gallegos, el 33,8 por ciento.
De hecho, las tres ciudades más grandes de Galicia únicamente aglutinan el 23,8% de la población gallega, aunque sumadas a las demás capitales, que se encuentran entre los 50.001 y los 100.000 habitantes (el 12,7% de la población), sí suman la mayoría del padrón en términos relativos, con el 36,5%. Mientras, los municipios con entre 1.001 y 10.000 habitantes acogen al 28,7% de los empadronados en la comunidad. Del total de habitantes de Galicia, 92.062 eran extranjeros, 4.873 (+5,6%) más que a 1 de enero de 2017, lo que no sirvió para paliar la pérdida poblacional. En ningún municipio gallego se superó el 20% de población de origen extranjera y solo en uno se alcanzó un porcentaje de entre el 15 y el 20%, en la provincia de Ourense.
En la mayoría de los ayuntamientos gallegos, concretamente en 290 de los 313, el peso de la población inmigrante no supera el 5% y alcanza hasta el 10% en un total de 17. En cinco municipios, los inmigrantes llegan a poder representar el 15 por ciento.
En cuanto a España, del total de 46.698.569 habitantes, 41.979.151 personas tienen nacionalidad española (el 89,9% del total de inscritos) y 4.719.418 son extranjeros (el 10,1% del total). En 2017, el número neto de españoles inscritos descendió en 20.174 personas (un -0,05%), pero el de extranjeros aumentó en 146.611 (un 3,2%). Entre estos últimos, los pertenecientes a la Unión Europea se incrementaron en 2.709 (0,2%) y los no comunitarios crecieron en 143.902 personas (un 5,1 por ciento).
Desde el 2000, el aumento de población en España fue debido fundamentalmente a la inscripción de extranjeros, cuya cifra pasó de 923.879 ese año a 5.751.487 a 1 de enero de 2011. A partir de ese momento, la cifra de extranjeros comenzó a descender hasta el 2016 incluido.
