El presidente de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), Antón Reixa, garantizó ayer que la entidad no cobrará derechos de autor por las actividades formativas de centros escolares y en conciertos solidarios.
Reixa, que fue elegido presidente de la SGAE el día 8, mostró su intención de que la entidad se ponga “al servicio de la ciudadanía”, eso sí, defendiendo siempre lo que considera legítimo que es el salario social de los autores.
“Es una fortuna ser titulares de un patrimonio autoral, que nos permite hacer algo por la sociedad; lo queremos hacer bien”, insistió Reixa, que destacó la necesidad de que la entidad tenga la sensibilidad suficiente para detectar situaciones en las que se precisa de su solidaridad “e intervenir en ellas para aportar algo”.
Eficiencia > El nuevo presidente de la SGAE puntualizó también que la entidad intervendrá en las acciones solidarias cuando tenga la “absoluta garantía de que es una solidaridad eficiente y bien gestionada”.
Reixa también precisó que este compromiso es de los autores y que se dan casos como que, aunque haya una cesión solidaria del trabajo de un cantante como intérprete, no la haya de los derechos del repertorio que puede cantar que no es de su autoría.
Para hacer frente a las polémicas surgidas durante los últimos años por la forma de recaudación de la SGAE, Reixa anunció que se dotará de un “manual de buenas prácticas” a su red de comerciales, unos 170 profesionales que, aunque son los que están en contacto con la sociedad están fuera de su estructura laboral.
“Lo que establece la ley es la obligación de pagar el derecho de autor, pero cómo y cuánto se paga es un pacto libre entre la SGAE y el ciudadano. Es en ese terreno donde vamos a actuar”, enfatizó.
De esta forma, por ejemplo, explicó, será muy diferente la gestión que haga la SGAE con grandes cadenas de peluquerías con franquicias en toda España que la que se realice con una pequeña peluquería en un pueblo, casos estos últimos en los que la entidad aspira también a dar un servicio con valor añadido mediante hilos musicales o plataformas legales de músicas.
Otro cambio que puso en marcha Reixa desde su llegada es el de enterrar el “hacha de guerra” con la Asociación de Internautas, de tal forma que ambas entidades acometerán conjuntamente una campaña de divulgación sobre la compensación por copia privada que sustituye al desaparecido canon digital.
Reixa se mostró muy crítico con la decisión del Gobierno de incluir esta compensación en los Presupuestos Generales del Estado.