El proyecto Enki, que ya ha organizado distintas actividades para dar a conocer la diversidad funcional en A Coruña, se instaló en la mañana de ayer en el Colegio Liceo La Paz. La Fundación Abrente, promotora de esta iniciativa, quiso así acercar la discapacidad a los niños, de manera que en un futuro empaticen con las personas que la padecen y la vean como algo normal. Tras el éxito alcanzado, el objetivo es hacer llegar la actividad a otros centros educativos de la ciudad.
Un total de 75 estudiantes de sexto de Primaria del Liceo participaron ayer en las actividades de sensibilización del proyecto Enki, que hoy se repetirán en el centro pero con otros destinatarios.
En estas acciones de Abrente –que cuenta con el respaldo de la Fundación María José Jove, el Ayuntamiento y la Obra Social “la Caixa”– los niños contaron con tres monitores especializados y los deportistas Ángel López y Martín Varela, dedicados al triatlón y el handbike y al tenis, respectivamente.
De esta manera ellos también se implicaron con los deportes adaptados poniéndose en el lugar de una persona ciega o de un afectado por tetraplegia, por ejemplo. Después de explicar lo que es la diversidad funcional, los alumnos se animaron a practicar tenis, silla de atletismo, baloncesto y fútbol, entre otras disciplinas.
Según la presidenta de la Fundación Abrente, Carmen Touza, este programa pretende desarrollar “una intervención directa con deporte adaptado” para “dar normalidad” y para que los niños y niñas “puedan ponerse en el lugar del otro”. “Para los niños, no hay barreras, no tienen prejuicios y el contacto que tienen es con los discapacitados es el abuelo, la persona ciega que conocen... pero nunca han practicado deporte adaptado y de esta forma se divierten y se aporta esa normalidad que tanto se necesita”, recalcó.
Una vez confirmado el interés de los jóvenes en la experiencia piloto, el objetivo es “elaborar un calendario con todos los centros” coruñeses.