La sala Sargadelos vuelve a abrirse al público en Belas Artes con novedades

El museo de Belas Artes le daba vida de nuevo a la sala Sargadelos, después de un parón por problemas estructurales en el edificio. En un acto en el que participaban el secretario xeral de Cultura, Anxo Lorenzo, y la directora del centro, Ángeles Penas, el habitáculo volvía a recibir las miradas de curiosos que podrán repasar la historia de la loza más emblemática del país en pocos metros cuadrados. El paréntesis temporal fue aprovechado por los encargados del museo para revisar el discurso monográfico realizando una reordenación de los objetos e introduciendo nuevas piezas para ampliar el extenso abanico de una fábrica que vio la luz en la Mariña lucense.
Además, Belas Artes dotó a la exposición de un soporte informativo para facilitar el paseo en el tiempo del espectador. De esta forma, la historia de Sargadelos se presenta en distintos niveles y se completa con imágenes, gráficos y mapas.

nuevas tecnologías
Las nuevas tecnologías se encargan de hacer el croquis. En un recorrido que empieza con información general distribuida en paneles, que contextualizan la época de cambio entre los siglos XVIII y XIX, en la que Ibáñez encuentra factores idóneos para plantar un complejo industrial.
El visitante le pondrá cara al fundador y situará el germen de la fábrica en Cervo. Para conocer la evolución de sus piezas y la manera de trabajarlas y finalizar en 1875 con el cierre. En las vitrinas, se podrán ver las series decorativas que se fueron desarrollando y las técnicas. La idea es ampliar el discurso con un reseña informativa de cada una de los tipos con sello Sargadelos, a los que se accederá a través de una pantalla táctil, que incorporará efectos visuales en formato 3D. Para asimilar un trozo de la historia que dos genios se encargaron de continuar.