“Cuando escribir canciones no sea una necesidad dejará de existir Marlango”

La voz de Leonor Watling llevará la calidez al Playa Club el próximo sábado en un concierto en el que Marlango presentará su último trabajo, “El porvenir”. Un disco con el que, una vez más, ofrecen al público todo lo que tienen.

Partiendo del título del disco, ¿con qué porvenir sueñan como grupo?
Intentamos nos entregarnos mucho a las expectativas, que son lo que más daño te puede hacer, pero todo lo que tenemos va en este disco y nos pareció muy adecuado el título en este momento. Es como estar dando un salto, estar en el aire y no saber dónde vas a caer.

¿Desde que empezaron ha cambiado el panorama musical, quizá de ahí lo de estar en el aire?
Es una pregunta con muchas respuestas. Por un lado diré que siempre está en crisis el panorama musical. La primera cosa que nos dijo Carlos Galán, de Subterfuge, cuando firmamos con él para el primer disco fue ‘estáis seguros, porque ahora es el peor momento en la industria discográfica’. Y eso fue hace diez años (ríe). O sea, que siempre ha estado en crisis. Por otro lado, ahora hay un montón de propuestas muy bonitas y a las que les está yendo bien. Y luego lo que pasa es que la cultura en vivo en general está sufriendo. El 21% de IVA es como la última gota.

¿Tiene la sensación de que ahora se busca cultura para consumo rápido?  
Creo que es una sensación que siempre tenemos. Creo haber leído una cita de Ptolomeo que ya tenía esa sensación (ríe). Algo como ‘ahora la cultura no es lo que era y es terrible’ (entre risas). Creo que ha cambiado el modo de consumir cultura. Tenemos muchos más estímulos y forma de acceso más rápida. Pero no pierde calidad.

¿Escribir canciones sigue siendo una necesidad?
Sí. En el momento en el que deje de serlo dejará de existir Marlango. Si miras la discografía te darás cuenta de que no hay nada planeado. Son canciones que nos hacen falta. Con el tiempo, espero que se note lo que aprendemos en el estudio y en el escenario, pero cuando vuelves a la matriz, al núcleo Alejandro y yo componiendo, vuelve a ser una necesidad. Algo muy egoísta y muy básico.

Hace años decía que componía en inglés porque le salía de forma natural. ¿Ahora está más cómoda en castellano?
Sí, pero he tardado diez años. No es un giro de volante. Desde que empezamos cantábamos versiones de canciones en castellano y al sentarnos a componer intentábamos probar, pero hasta que encontré esas canciones en castellano no hicimos un disco. Sigue siendo más complicado que en inglés, porque gramaticalmente es más difícil, pero he encontrado mi voz en español y tengo las dos posibilidades.

¿Cómo es el proceso de encajar letra y música?
No nos cuesta ponernos de acuerdo porque llevamos muchos años trabajando juntos y no somos educados en ese sentido, no perdemos tiempo con lo que le gusta al otro porque tenemos claro que Marlango es lo que nos guste a los dos. Hay cosas que a mí me gustan mucho y Alejandro me dice que para cuando haga mi disco en solitario y lo mismo al revés. Marlango es el territorio que compartimos, siempre intentamos tirar para cada uno para nuestro lado pero con el respeto de que es un trabajo en equipo. Luego, cada canción es muy distinta: algunas nacen con la letra, otras con la melodía...

En “Dinero”, el primer single,  repetís “Paraíso no es aquí”. ¿Dónde es?
No lo sé. Es una frase que escuché a alguien en la calle y me pareció genial. Pensé “esto tengo que cantarlo” (ríe).  Me pareció tan realista, tan de Berlanga. Como si alguien preguntara: “¿Paraíso? No, aquí no es; es al fondo a la derecha”. Y de ahí viene esa canción. De esa frase y de esta sensación de que todo es mañana.

¿Impone versionar un clásico como “Ay, pena penita pena”?
Mucho. Creo que más a mí que a Alejandro, a nivel intérprete. Es una canción que ha cantado Lola Flores, que recientemente ha cantado Silvia Pérez Cruz, que es otra cantante a la que admiro muchísimo. Es una canción como los grandes personajes de Shakespeare, que los ha interpretado alguien muy grande antes. Es una canción preciosa y dan ganas de sacarla de Andalucía y ver qué pasa.

¿Eliges tus trabajos como actriz en función de Marlango?
Sí. A no ser que sea algo que te dinamite todo el razonamiento y haga que se vaya todo al traste. Si saco un disco no voy a dejarlo huérfano y parar una gira.

Hay artistas que con el tiempo dejan de sentir sus canciones. ¿Le ha pasado esto?
Sí, hay canciones que caducan y que ya no quieres volver a tocar. Hay canciones que sirven para algo, pero una vez que las has tocado piensas "qué es esta canción y qué hace aquí, por qué me está mirando" (ríe).

¿En A Coruña van a sonar canciones de los discos anteriores?
Sí, aunque el disco nuevo es el que manda, es la excusa para ir a tocar. Las últimas canciones son las que más ganas tenemos de oír como músicos, son las que te muerden los tobillos.