Balaídos acoge una nueva batalla en la lucha por la permanencia

Balaídos acoge hoy un trascendental encuentro para el futuro del Celta de Vigo y el Betis, dos equipos inmersos en la lucha por eludir el descenso, aunque el choque tiene más tintes de ‘final’ para el equipo verdiblanco, colista de la liga BBVA con tan sólo once puntos.
Tras desaprovechar ante el Espanyol una nueva ocasión para encadenar dos triunfos consecutivos, el Celta vuelve a verse al borde del abismo, con tan sólo tres puntos de ventaja sobre los equipos que cierran la zona de descenso, Valladolid y Rayo Vallecano.
Una delicada situación que se agravaría en caso de derrota ante un Betis que llegará a Vigo con nuevo entrenador, después de que el argentino Gabriel Humberto Calderón sustituyese a principios de semana al cesado Juan Carlos Garrido, quien anteriormente había relevado en el cargo a Pepe Mel.
En el vestuario celeste nadie oculta la importancia de los puntos en juego, ya que ganar supondría dejar medio hundido a un rival directo, pues el Celta alejaría al conjunto verdiblanco a once puntos y se aseguraría el golaverage particular.
Para este importante choque, Luis Enrique pierde por sanción al centrocampista internacional argentino Augusto Fernández, quien vio en Cornellá-El Prat su quinta tarjeta amarilla.
La buena noticia para el técnico celeste es que el capitán Borja Oubiña ya está recuperado del esguince que sufrió el miércoles en su tobillo izquierdo y no se perderá el trascendental duelo, por lo que su entrenador no se verá obligado a adelantar la posición del central Andreu Fontás.
El Real Betis llega a Balaídos en busca de su primer milagro -o victoria- a domicilio en la actual temporada, lo que permitiría abrigar esperanzas de salvación, con la visita a un rival también con apuros en la clasificación. El club ha recurrido a un nuevo revulsivo para enmendar la caótica situación, con el fichaje del nuevo técnico, Gabriel Humberto Calderón, ex jugador verdiblanco, que suple a Garrido.