Las 4 provincias gallegas pasarán a la fase 1 de la desescalada a partir de este lunes, lo que implica que sectores como el comercial y el hostelero podrán reanudar su actividad económica ordinaria después de más de 50 días con la reja echada, algo que el comercio acoge "con esperanza" y la hostelería con "incertidumbre".
Así lo expresan voces como la del presidente de la Federación Gallega de Comercio, José María Seijas, quien explica que espera una "remontada" de la actividad económica "lenta". Considera que la mayoría de locales usaron la fase 0 para "prepararse" y así poder abrir en "condiciones de seguridad" a partir de este lunes, cuando comienza la fase 1.
"Abrir no significa que vayamos a empezar a vender, será lento", pero "lo más importante es que los consumidores se conciencien de que tiene que comprar en el pequeño comercio, en los locales de su barrio", porque "donde no hay comercio, no hay vida, no hay alegría ni luminosidad", ha destacado.
En este sentido, el presidente de la Federación ha subrayado que se lanzarán campañas de concienciación hacia los consumidores para que "se mentalicen" de que ellos serán una clave para mantener con vida este sector.
"El comercio subsiste de la gente que sale a la calle" y, por este motivo, la máxima de los locales es "abrir cumpliendo con las directrices de Sanidad" para así trasladar "seguridad" al consumidor y que "no tema" a la hora de acudir a ellos.
A pesar de que el sector acoge esta fase "con un poco más de esperanza" que la anterior, "las cosas poco cambian". De hecho, Seijas no entiende "cómo la CEOE pudo haber aceptado la prórroga de los ERTE en esos términos". El acuerdo con el Ministerio de Trabajo "no es suficiente", ha apuntado.
Por su parte, el presidente del Clúster Turismo de Galicia, Cesáreo Pardal, reconoce que "sigue habiendo incertidumbre" en un sector que durante este fin de semana vivió "pendiente del BOE" para conocer su futuro.
A pesar de la entrada en la fase 1, las restricciones de movilidad entre provincias que todavía perduran le permiten prever que los locales abiertos este lunes no van a llegar al 5%. "El empresario no tiene su negocio abierto para perder dinero", dice.
Sin embargo, el presidente de este clúster no da por perdido el verano y confía en que, "aunque sea a mediados del mes de julio, se pueda recuperar" la actividad. Eso sí, advierte que "como mínimo, la ocupación va a bajar al 50%".
Pero, sin duda, lo que va a influir en gran medida al sector turístico gallego será la evolución de la pandemia en la Comunidad de Madrid, que este lunes no pasará a la fase 1, por lo que podría no abrirse hasta julio. Por ello, toma esta región como ejemplo para señalar la importancia de controlar la transmisión de la COVID-19.
Tal y como subraya, el desconfinamiento debe iniciarse y desarrollarse "con todas las garantías", pues en caso contrario dice que prefiere mantener la verja bajada. El presidente del Clúster ve que "el efecto miedo" en la población a infectarse "sigue latente" y por ello apela a dar "confianza" a los consumidores, sobre todo de cara al Año Santo 2021.
Al respecto de los protocolos a seguir para la apertura prevista para este lunes, saluda que no suponen "grandes inversiones" --por ahora, elementos como las populares mamparas no son obligatorios--, sino que son cuestiones "lógicas" y "que se pueden aceptar" en su gran mayoría como mascarillas, guantes y desinfectantes, así como una "limpieza mucho más exhaustiva por las zonas por donde transitan las personas".
En clave económica, Pardal lamenta que el Gobierno deje "la patata caliente" encima de los empresarios e insiste también en la necesidad de que "flexibilice" la vigencia de los ERTE más allá del estado de alarma y también en que el Estado "rescate" con una inyección millonaria a un sector que en Galicia, según sus cifras, ofrece 125.000 puestos de trabajo directos, a los que habría que sumar los indirectos.
"Lo que tiene que hacer el Gobierno es salir al rescate del sector turístico igual que fue con la banca en su momento", insiste Pardal, en la que también critica que no se "condonen" los impuestos: "¿De qué nos vale que nos aplacen el pago del IVA al 20 de mayo o al 20 de octubre? Yo no sé si en octubre voy a tener ese dinero".
En una perspectiva más municipal, el responsable del restaurante A Nave de Vidán y miembro de la Asociación Hostelería Compostela, Lois López, reduce a "bastante anecdótica" la apertura de locales que se va a producir en la capital gallega a partir del lunes.
"Entre las terrazas, que son ya bastante pequeñas, y las limitaciones de capacidad... No hace viable la apertura", lamenta, para cifrar en el 5% los negocios que levantarán la verja en fase 1.
Limitar las terrazas al 50% y garantizar la distancia entre las mesas es algo que "prácticamente solo dos o tres enclaves" de Santiago, como Praza Roxa o la zona de Cervantes, puede cumplir. Y todo ello a pesar de que el Ayuntamiento permitirá ampliar la extensión de las terrazas a partir del lunes.
A este problema de espacio se sumará el tiempo, puesto que las predicciones para esta semana que entra no son buenas, pero también las "dificultades económicas" que va a sufrir el sector, ya que la "crisis social" derivada de la pandemia afectará a la "confianza" de la ciudadanía.
LA POSICIÓN DE LOS AYUNTAMIENTOS
Por parte de los ayuntamientos, el presidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), Alberto Varela, ha comentado que uno de los datos que reclaman para poder organizarse son las cifras que definen la evolución "de la pandemia en su localidad". Sin embargo, Varela ha asegurado que la Xunta "no facilita esta información" por lo que los gobiernos locales dudan en sus actuaciones.
Lo que sí han hecho es facilitar la reapertura de bares y restaurantes permitiéndoles ampliar sus terrazas para poder cumplir con las normas de seguridad y distanciamiento social y así tener la posibilidad de aumentar el espacio de servicio para el 50% de su aforo total.
Muchos comercios han trasladado su "preocupación" a los gobiernos locales "por si van a poder abrir sus puertas y si van a conseguir aguantar", ha explicado Varela. "El sector hostelero va a ser uno de los más afectados y están preocupados" por las condiciones, pero "satisfechos" por este avance.
Por otra parte, para buena parte de la ciudadanía resulta confuso el cambio de criterio para cumplir con las franjas horarias. Si bien antes se establecía que ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes estaban libres de seguir las normas horarias, ahora se entiende que los núcleos de población de menos de 5.000 habitantes son los que no tendrán que cumplir estas reglas.
Sin embargo, esto no exime de que se cumplan el resto de normas que establece la fase 0 y que pueden cambiar en la fase 1. Varela ha explicado que un habitante de una parroquia con menos de 5.000 habitantes puede salir a la calle de 06,00 a 23,00 horas, pero cumpliendo con el resto de parámetros. Por lo que no puede salir de su parroquia o núcleo poblacional para realizar paseos o ejercicio.
Donde sí existan franjas horarias, éstas podrán "adaptarse" a partir de la fase 1 y la Comunidad Autónoma será la responsable de variar los horarios elegidos tras el acuerdo de cogobernanza que ha aprobado el Gobierno central.
Las administraciones locales también reclaman al Gobierno central y al gallego que se publique "información más detallada" para que los ayuntamientos no se enteren "por los medios de comunicación" de las medidas que se van a implantar.