El Liceo aspira a conseguir un buen resultado en el Palau para la vuelta

Vuelve el clásico del hockey mundial, esta vez con Barcelona y Liceo jugándose una plaza en las semifinales de la Liga Europea. En la fase de grupos, los coruñeses fueron mejores que los catalanes, algo que les permitirá poder disputar el partido de vuelta en Riazor. Sin embargo, los de Ricard Muñoz están en un gran momento, liderando la OK Liga y tras haber conquistado la semana pasada en Reus (y con bastante autoridad) la Copa del Rey.
Torneo en el que los verdiblancos vivieron una nueva decepción (ya son doce años sin ganarlo) por lo que esperan que la Liga Europea les sirva para recuperar la ilusión. Los hombres de Carlos Gil ya se han enfrentado dos veces a los azulgrana en la presente campaña. En la final de la Supercopa de España, en Vic, se impuso el Barça por un ajustado 6-5. Y en el partido de la primera vuelta de la OK Liga, también en el Palau, se registró un empate (4-4).
Mucha igualdad entre dos escuadras que se conocen perfectamente. Y una eliminatoria que se puede decidir por pequeños detalles. Gane quien gane, parece que el partido de Riazor será el que dicte sentencia.
Eso sí, en estos momentos el Barcelona intentará no solo aprovechar el factor cancha, sino también el momento dulce de la Copa del Rey. Los azulgrana ganaron el título, y además lo hicieron con bastante solvencia, gracias a su poderío defensivo (solo dos goles en tres partidos) y a la efectividad de su ataque.
Por ello, los jugadores del Liceo esperan tener uno de sus mejores días para encarrilar una eliminatoria que va a ser muy dura. Por ello, tendría un enorme mérito superarla y sería una gran inyección de moral para un Liceo que quiere ganar esta temporada algún título.