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jueves | 18 abril | 2024
El Chuac acogió ayer la cuarta edición de la jornada de investigación biomédica del cáncer en Galicia, que organiza el Inibic. El encuentro se dirigió a profesionales del ámbito biomédico de las ciencias de salud, estudiantes y titulaciones afines a la investigación y contó con la participación de referentes en Oncología como la doctora Pilar Garrido, jefa de la sección en el hospital Ramón y Cajal, que habló de “Mujer y liderazgo científico”, dos términos que no se quieren mucho, si bien las cifras son alentadoras.
La médico contó que ellas están presentes en un 30% de las ponencias que se celebran en Europa en este campo, pero esta proporción no aumenta de manera progresiva: “Formamos parte de equipos, pero no estamos al frente”. La especialista contó en la ciudad cómo las mujeres son “menos audaces”. “Y tendemos a pensar que no estamos preparadas”. Por eso, anima a los gerentes y responsables de centros para que “den oportunidades a las mujeres en las que creen” y que estas se guíen por modelos. En este sentido, Garrido toma como ejemplo a sus pacientes. Son un reto y una motivación, pero también un modelo de dignidad, “de los que aprendo a diario”. En su caso, tuvo claro su camino y tuvo el apoyo de su entorno, “que te impulsa”, aunque reconoce que el trabajo fue duro.
Y es que a lo largo de su carrera, invierte tiempo y esfuerzos para solidificar su trayectoria, pero se siente una privilegiada de dedicarse a la oncología por acompañar “a pacientes en una situación emocional complicada, vamos a estar con ellos para intentar mejorar su situación”. Con la cercanía como bandera y la investigación más puntera, la especialidad avanza y “cuando ya llevas muchos años, te das cuenta de cómo han cambiado las opciones de tratamiento”.
La que fue la primera mujer presidenta de la Sociedad Española de Oncología Médica en 2013 habla de que cada vez los fármacos se personalizan más según el expediente y a pesar de que no cree que se llegue a erradicar porque “al hablar de cáncer hablamos de muchas enfermedades a la vez” y “la previsión es que aumente por el incremento de la esperanza de vida”, opina que se convertirá en un mal crónico en muchos casos y que la gente podrá vivir con él y tener una buena calidad de vida.
