El pazo de los Ortega recupera su aspecto con el desmontaje de la carpa de la boda

El pazo de los Ortega recupera su aspecto con el desmontaje de la carpa de la boda
Varios operarios desmontan la lona que cubría uno de los módulos instalados en el pazo javier alborés

Calma. Eso es lo que se respiraba ayer en Anceis. Si el sábado por la tarde decenas de personas curioseaban a las puertas del pazo de Amancio Ortega para ser los primeros en ver la llegada de los novios, ayer los únicos que hacían guardia delante del portalón de la propiedad eran los responsables de seguridad encargados de velar por las instalaciones.

Con la hija del fundador de Inditex, Marta Ortega, y el jinete Asturiano Sergio Álvarez ya casados y ultimando su luna de miel, los operarios iniciaron ayer el desmontaje de las carpas que se levantaron dentro del recinto para acoger tanto la ceremonia como el banquete, el sábado por la noche. Como si de un club hípico inglés se tratase, el interior –con suelo de madera y paredes forradas de terciopelo granate oscuro– estaba adornado con fotos de los novios y cuadros de la familia. De la decoración, cuidada hasta el mínimo detalle –incluso el exterior de las carpas se forró con una lona que simulaba una pared empedrada– se encargó la empresa belga Pro First Event Designer, especializada en grandes eventos, y el propio equipo de Inditex.

Los invitados, satisfechos, se quedaron gratamente sorprendidos con la actuación musical

Para su montaje fueron necesarios varios días, por lo que es casi seguro que los trabajos continuarán en el pazo de Drozo a lo largo de esta semana. Mientras, ayer, la estampa era similar a la de los preparativos: gente entrando y saliendo, portando cajas,... Eso sí, las caras, al igual que el sábado, daban muestra de que todo había transcurrido según lo esperado.

 

Boda redonda > Esa misma satisfacción podía apreciarse ayer en los rostros de los invitados que esperaban en el aeropuerto de Alvedro a regresar a su lugar de origen. Y es que el banquete y todos los detalles preparados para deleitar a los 190 invitados los Ortega fueron un éxito. En especial, la música que sonó tras la cena, de la que se encargó el grupo de soul californiano The Pointer Sisters. Muchos comentaban que el sonido había sido maravilloso. Todo sobre un escenario, también de estilo británico, en el que un piano de cola ponía el broche final.

Fue el tema de “I’m alive”, de Celine Dion, con el que los novios abrieron el baile el sábado por la noche después de que los asistentes degustasen una cena a base de salpicón de bogavante, “pitu de calella” (pollo salvaje asturiano) y merluza a la gallega, preparados por los chef con estrella Michelin: el santiagués Marcelo Tejedor y el asturiano Nacho Manzano. Un bar de estilo inglés, una sala de fumadores y unos aseos creados especialmente para la ocasión completaron las instalaciones de las que disfrutaron los familiares y amigos de los Ortega.

Para animar a la veintena de niños que acudieron al enlace en Anceis, Marta y Sergio contrataron a un mago, que entretuvo a los más pequeños, que cenaron en un salón diferente.

Es probable que la pareja de recién casados disfrute de su luna de miel en Australia. Ayer el tema más comentado entre las páginas de moda era el vestido que lució la rica heredera el día del enlace, de Narciso Rodríguez, ideado dentro de la central de Inditex. El diseñador norteamericano, creador de firmas como Loewe, se hizo famoso tras diseñar el vestido de novia de la fallecida Carolyn Bessette para su boda con John F. Kennedy júnior, en 1996.

El pazo de los Ortega recupera su aspecto con el desmontaje de la carpa de la boda

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