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sábado | 20 abril | 2024
El fabricante alemán de automóviles de lujo BMW retirará del mercado chino más de 2.000 todoterrenos de su modelo X5 exportados al país oriental, debido a defectos relacionados con sus frenos, anunció el organismo chino de control de la calidad, recoge hoy la agencia oficial Xinhua.
La retirada afectará a los modelos vendidos en China entre 2007 y 2010 con motores V-8, y que fueron producidos entre el 9 de mayo de 2006 y el 18 de marzo de 2010, precisó la Administración General de Supervisión de la Calidad, Inspección y Cuarentena.
El defecto implica que el impulsor de los frenos de los vehículos afectados puede llegar a verse deteriorado por posibles fugas de aceite lubricante de sus bombas de vacío, lo que, de ocurrir, podría provocar que el sistema auxiliar de los frenos no funcione bien, e incluso desencadenar un problema de seguridad.
La filial de BMW en el país asiático contactará con los conductores afectados para reemplazar los componentes defectuosos de manera gratuita.
El año pasado BWM también tuvo que retirar de las carreteras chinas 120.246 automóviles de sus series BMW 5 y BMW 6 por posibles problemas en una cobertura defectuosa de los cables del sistema de la batería, y otros 3.406 vehículos de importación, del modelo Mini Cooper, por un fallo en su refrigeración del sistema electrónico.
En noviembre de 2011 anunció también la retirada de 3.198 vehículos del mercado por un problema similar en las bombas de agua que refrigerar el sistema eléctrico, aunque la compañía no dio detalles sobre si en todos los casos el fallo fue el mismo.
El pasado 1 de enero entraron en vigor en China nuevas normas de control de la calidad de los vehículos más estrictas que hasta la fecha.
La nueva normativa permite a las autoridades chinas multar e investigar a los fabricantes de automóviles en China que, en caso de detectarse defectos en sus vehículos, no los retiren del mercado para corregir el problema con la rapidez necesaria.
En 2012 hubo en total 113 casos de retiradas de vehículos en toda China, lo que implicó a cerca de 3,2 millones de modelos defectuosos, un 75 por ciento más que lo detectado en 2011.
