Una de las leyendas del revival granjero que arrasó en los ochenta pisará esta noche, a partir de las nueve y media, la sala Mardi Gras en una cita con el rock, el baile y la diversión. Los Fleshtones llegarán a la ciudad para regalar pildoritas repartidas entre una veintena de discos editados después de lanzar su primer sencillo en 1979 y no dejar de hacerlo hasta hoy.

La formación ha girado en este tiempo por todo el mundo en una puesta en escena donde el rock se aliña con el r&b, el rockabilly y el surf. En 2011, The Fleshtones unían sus fuerzas con Lenny Kave (Patti Smith Group). De ahí, salía el trabajo “Brooklyn Sound Solution” (Yep Rock Records) del que darán buena cuenta esta noche, a la vez que desde el audiovisual condecoraban al grupo con medallas a través de un documental “Pardon Us For Living, But The Graveyard Is Full”, en el que se retrataba su trayectoria de tres décadas de savoir-faire con veinte discos en la guantera.

Por su parte, el local programa para esta semana una segunda cita mañana pero, esta vez, con el hard rock y los estadounidenses The Last Vegas, una formación que cruza el charco avalada por premios como el Be Guitar Hero II o el más reciente Make Rock History. Contemporáneos de “A Ghost Is Born”, de Wilco, y “Fort Recovery”, de Centro-Matic, los norteamericanos rezuman algo especial.

El fin de semana sonará en la Mardi Gras a folk y rock con los zaragozanos Big City el viernes, que presentarán los temas de su último trabajo “Celebrate It All”, escrito en coches atrapados por la nieve y a bordo de aviones transatlánticos, en furgonetas alquiladas y habitaciones sin dueño. Los maños aseguran que el disco contiene dudas y reflexiones de sujetos que no están quietos.

Por otro lado, el rock volverá a llenar la sala con los locales Púlsar y el barcelonés Elvira, que harán pareja durante la noche del sábado para mostrar su evolución en el tiempo. Los primeros por la incorporación de Manuel Porca y Andrés Saavedra y el catalán por volcar en este proyecto todo lo que le sale de la cabeza, sin ningún tipo de prejuicio. Prueba de ello es su segundo trabajo.