Arteixo creará dos nuevos paseos fluviales en Vilarrodís y Candame

Arteixo acaba de recibir, por parte de Augas de Galicia, los permisos necesarios para acometer la construcción de dos nuevos paseos fluviales en los regatos  de Teixueiras y Bidueira, situados en Vilarrodís y la zona de Candame, respectivamente.
La intención del Gobierno de Carlos Calvelo es aprobar en el pleno de agosto el proyecto constructivo y el expediente de expropiación necesario para convertir en públicos los terrenos que bordean el cauce.
Concretamente, el paseo de Vilarrodís partirá de la calle Ponte y llegará hasta la calle Vilarrodís, con una longitud de más de un kilómetro y una inversión de 156.000 euros. Según indica el Ayuntamiento, parte de la senda discurrirá sobre una pasarela de madera anclada en el terreno y a lo largo del trazado también se colocará mobiliario urbano. La obra también incluirá la restauración de dos antiguos molinos que
se encuentran al borde del Rego das Teixueiras.
La construcción de este nuevo paseo fluvial requerirá desbrozar el terreno, ejecutar capas de zahorra, instalar canalización de pluviales, construir un puente de madera que permita cruzar el río y colocar mobiliario urbano, apuntan desde el Ejecutivo municipal, que también realizará trabajos de jardinería en el entorno

Otro proyecto
La otra senda discurrirá por los márgenes del río Bidueira, situado en el núcleo de Arteixo y que pasa por O Foxo y Candame. El trazado también tendrá sobre un kilómetro de longitud, iniciándose en O Foxo y desviándose por un nuevo ramal hasta Candame, que limita con la carretera AC-552, entre A Coruña y Carballo.
Arteixo dispone de un proyecto para construir esta nueva senda peatonal que, concretamente, empezará frente a la plaza Alcalde José Naya, en las proximidades del centro de salud, y continuará hasta la calle Hospital. El paseo pasará al lado del Aula da Natureza Muíño Vello. 
El documento prevé también la creación de dos plazoletas. La senda se ejecutará sobre una pasarela de madera hincada en el terreno con la que se conseguirán salvar las diferencias de altura del terreno sin realizar rellenos sobre el suelo natural. La obra, indican fuentes municipales, tendrá un coste de 123.000 euros.
La autorización de la Xunta, a través de Augas de Galicia, permitirá aprobar el proyecto en agosto.