La ciudad parece haber olvidado el poblado de As Rañas. Sin embargo, el núcleo sigue ahí, así como las 23 familias que lo componen, y que han recibido estos días una notificación del Ayuntamiento que les advierte de que tienen 20 días para presentar una alegación al vial de acceso al Puerto Exterior de la AC-14 (Tercera Ronda) que se construirá en su propiedad. De no hacerlo, serán expropiadas y desalojadas en el plazo de un año.
Pero todo apunta a que las 19 familias propietarias presentarán en bloque alegaciones para intentar salvar sus viviendas. Según denuncian ONG como Arquitectos sin Fronteras, As Rañas es otra consecuencia de la deficiente política urbanística que siguió el Ayuntamiento durante la época socialista. Hace cerca de 20 años se permitió a estas familia gitanas que levantaran casas en terrenos que era de su propiedad a pesar de que era suelo rústico, y a eso se van a agarrar ahora: a que no se puede construir en donde ahora tienen sus casas.
Lo cierto es que la comunidad que surgió en los terrenos ubicados entre A Grela y Pocomaco contó con el beneplácito del gobierno de Francisco Vázquez, de una manera parecida a lo que ocurrió con Penamoa, aunque este poblado, ya desaparecido, fue siempre precario porque se montó sobre terrenos municipales. En cambio, en As Rañas, el gobierno local llegó a instalar un sistema sanitario que costó 600.000 euros.
poco tiempo
Desde Arquitectos sin Fronteras alertan de que queda muy poco tiempo para solucionar un problema que era evidente hace mucho tiempo. “Nosotros ya advertimos lo que iba a pasar en la época del bipartito, y no tenemos una bola de cristal”, ironizaron, al tiempo que recuerdan que el gobierno de Carlos Negreira tampoco ha hecho gran cosa para solucionar el problema del chabolismo.
“Solo hablan del poblado de A Pasaxe y han ignorado los otros dos, los de O Portiño y As Rañas, y no se ha pasado un solo técnico de Servicios Sociales para hablar con esta gente”, denuncian. En un principio, los afectados se resisten a abandonar sus hogares, incluso ante la perspectiva de un desalojo forzoso. Tal y como están las cosas, los habitantes de As Rañas parecen llamados a protagonizar el próximo capitulo del urbanismo en A Coruña.