Vecinos de las Casas de Franco se quejan de las molestias que les provocan los árboles

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  Los árboles están dando más de un quebradero de cabeza a los residentes de las conocidas como Casas de Franco, en el barrio de O Ventorrillo. Junto al vetusto  bloque de viviendas se ubica, desde hace años, un pequeño jardín compuesto por plantas ornamentales, entre ellos palmeras y magnolios. Los residentes de las casas que están orientadas a la ronda de Outeiro aseguran estar “acostumbrados” a convivir con esta vegetación, pero se quejan de ciertas molestias debido a las cercanía de algunos árboles a las viviendas.
Como las palmeras, cuyo crecimiento excesivo, está provocando que las ramas se aproximen demasiado a algunas ventanas y bloqueen por completo las vistas de algunos inmuebles.
“Tampoco podemos abrir la ventana, porque nos entran semillas”, comentaba Lucía Gestal, que vive en el número 259 de la ronda de Outeiro desde hace más de medio siglo. Esta residente aseguró  que no es la primera vez que las ramas de los árboles dan problemas a la vecindad: “Esto pasa todos los años y siempre tenemos que llamar para que vengan a cortarlas”.
La propia vecina dio el aviso al Ayuntamiento para quejarse de los problemas que estaban dando las palmeras. “Nos dijeron que no nos preocupáramos, que antes del domingo pasarían por aquí, pero de momento, no vino nadie”, indicó Gestal.
Los vecinos de la primera y segunda planta del bloque de edificios son los principales afectados, dado que las ramas llegan hasta esa altura. Al igual que Lucía Gestal, la mayoría de los residentes son personas de avanzada edad que tienen problemas de movilidad y que solo cuentan con la ventana de su vivienda como conexión con el exterior.

Mobiliario urbano > La excesiva proximidad de la vegetación provoca también que durante los días de calor haya una mayor concentración de insectos junto a las casas.
Las ramas de los árboles no son el único motivo de queja  de los habitantes de las Casas de Franco. Muchos vecinos denuncian el estado de abandono de los jardines situados en el frente de la ronda de Outeiro, sobre todo en lo relativo a las piezas de mobiliario urbano. Como, los bancos, que fueron pintados hace escasamente unos meses, pero que ya presentan un aspecto bastante deteriorado.
“Vemos que hay parques por otros barrios que están arreglados y están muy bonitos, con los bancos barnizados, pero aquí no tenemos nada de eso”, comentaba una vecina.
Por eso la vecindad solicita al Ayuntamiento que ponga en marcha, al menos, la poda urgente de los jardines y la mejora del entorno verde de la zona.

Vecinos de las Casas de Franco se quejan de las molestias que les provocan los árboles

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