Carlos García, o como es conocido por sus seguidores, Charly Sinewan, ya era un amante de los viajes antes de dejarlo todo y lanzarse a la aventura con una de sus motos.
Mañana a las 19.00 horas, en Marineda City, presentará su nuevo libro, “El mundo en moto con Charly Sinewan”, en el que desentrañará la parte organizativa de un viaje del calibre del suyo, que le ha llevado a recorrer todo el mundo.
Sinewan cuenta sus viajes a través de videoblogs en Youtube, pero en el momento que le surgió esta oportunidad no la quiso desaprovechar, “porque a través de la escritura puedes contar cosas que en los videos no se ven”. La falta de tiempo es uno de los grandes problemas que se encontró para poder dedicarle tiempo a escribir, hubo que “buscarlo”, aunque señala que “siempre hay ganas de escribir”.
Ya desde los 18 años le apasionaban los viajes, sobre todo en moto, pero fue entre 2009 y 2010 cuando decidió hacer un viaje más largo, “de seis meses, que se convertirían en ocho”, y ahí fue cuando decidió que esa era la vida que quería.
Es un viaje solitario, al que en ocasiones se suma gente o amigos que hacen parte de alguno de sus trayectos con él. Lo primero que se nos vendría a la cabeza es que tiene que ser complicado pasar tanto tiempo solo en la carretera, pero Sinewa explica que no es así. “Realmente lo complicado sería estar tanto tiempo acompañado, un viaje de este tipo es muy difícil compatibilizarlo con otra persona, porque son muchas decisiones y momentos duros”, explica.
“Son diez años, sería muy difícil tener la misma compañía”, sin embargo, reconoce que a él le gusta “estar solo”, aunque añade que “en realidad” tampoco está tan solo, ya que siempre se encuentra con alguien que le acompañe y tiene también a las miles de personas que ven sus vídeos.
Multiculturalidad
Tras una década recorriendo el mundo, hay una pregunta recurrente, pero Sinewan la soluciona rápido. “Si te soy sincero, no me han pasado cosas realmente extrañas, en estas preguntas suelo fallar, porque no he tenido encontronazos ni cosas similares”, señala entre risas. Lo que sí destaca es la cantidad de gente “que le ha abierto las puertas” o que le ha tratado de ayudar sin conocerlo de nada.
Los cambios culturales tampoco le resultaron problemáticos, en ningún sentido. “Cuando ya te acostumbras... yo ya tardo un minuto en adaptarme a cualquier circunstancia”, comenta, ya se ha acostumbrado a su “vida nómada”. “Somos supervivientes, estamos preparados para enfrentarnos a cualquier cosa”, afirma, y añada que “el mundo es menos complicado de lo que puede parecer cuando no lo conoces”.
Un viaje sin Ewan McGregor
Lo de su nombre empezó un poco “como una broma”. Cuando comenzaba con esto de los viajes, en televisión se emitía el documental de Ewan McGregor y Charly Boorman, “El mundo en moto con Ewan McGregor”. “Al principio yo lo hacía más pensando en mis colegas, pues dije, voy a hacer lo mismo pero sin Ewan McGregor, así que registré Sinewan, pero después se me fue de las manos, lo empezó a leer más gente y, como me llamaban Charly, se me quedó ese nombre”, explica entre risas.
Después de tantos años sobre la carretera y viendo que este modo de vida, en el que sus motos son su casa, le ha traído la felicidad, uno se cuestionaría si cambiaría algo de todo este tiempo. Pero él resalta que lo que le hubiera gustado era “haber empezado antes”. “Yo creo que no hay nada que cambiar, el viaje me ha traído hasta aquí, estoy perfectamente feliz y contento de lo que he hecho”, indica.
“Si pudiera hablar con mi yo de hace diez años no le diría nada, porque así se sorprendería de todo, que es lo importante, sorprenderse y aprender, porque cuando estás aprendiendo algo la motivación es altísima”, afirma Sinewan.