Pronósticos que nos dan alegrías

A falta de certezas, nos entretenemos con los pronósticos sobre el fin de la pandemia o, al menos, la vuelta a una normalidad más normal que la de ahora. Sabemos que tienen más de deseo que de validez científica, pero a algo tenemos que agarrarnos, que la perspectiva de que esto se quede así para siempre es desoladora. La mayoría de los expertos de todo el mundo habla del próximo verano como el punto en el que recuperaremos algo parecido a nuestra vida antes del bicho. Firmamos ya. Entre la segunda ola que no termina de bajar y la vacuna que parece que llega pero igual no, poder estar en julio en una playa sin mirar mal al que pone la toalla a menos de dos metros es un lujo. Y eso que lo de ir a una playa y no acabar en medio de una familia ajena que había ido ganando terreno era un gusto. Podemos ir soñando con terrazas y fiestas populares y así se nos hacen más llevaderas las restricciones.

Pronósticos que nos dan alegrías

Te puede interesar